En este texto recogemos tres modelos de representación de unidades culturales. El primero de ellos, el diagrama gráfico, presenta una naturaleza bidimensional y requiere de nuestra aprehensión racional. El segundo de ellos, el diagrama plástico o mándala, se expone como la estructura interior de la realidad expuesta o como modelo, doble, asimismo de realidad a pequeña escala. El tercero de ellos, el holograma, carente de interioridad, nos desplaza al orden de los espectros, virtual, desde el que reconocemos nuestra existencia presente.