El presente trabajo tiene como propósito la factura de una investigación en torno al fenómeno del conocimiento a partir de la filosofía de Eduardo Nicol. Para este pensador el conocimiento se estructura en tres momentos, a saber, el aparecer, el reaparecer y el parecer. Esto significa que primero se da el ser, en un segundo momento tiene lugar la percepción de lo dado, y en tercer lugar se da la presentación dialógica de lo ajeno. Es justo en este tercer momento donde se puede hablar de la objetivación, la cual consiste en el reconocimiento apofántico y común del ser.