Resumen
El paisaje es una realidad compleja, situada en la charnela en la que coinciden lo objetivo con lo subjetivo, lo natural, lo social y cultural. Este trabajo estudia la representación de los paisajes andinos en las categorizaciones simbólicas de determinados territorios. En dicho proceso, la clave se encuentra en la visión monista, ética, mítica y mística del universo propia de las civilizaciones precolombinas, tan diferente a la visión analítica, estética y maniquea de la cultura occidental vinculada a la modernidad. Por tal motivo se propone que el camino más riguroso para entender los paisajes andinos está en una lectura hermenéutica de los mismos, que obliga a contemplarlos como textos que hay que descifrar recurriendo a recursos tan distintos como la descripción, la analogía y la metáfora que sirven de mediadores de un diálogo complejo con culturas poco homologadas. Sin caer en el determinismo, se entiende que la naturaleza influye en estas culturas y en la constitución de sus paisajes, al tiempo que estas culturas actúan para convertir limitaciones en recursos, pero siempre desde un respeto reverencial al orden natural. Hay una necesidad de adaptarse a lo que ya existe, donde todo tiene su sitio y se complementan. La mezcla define estos paisajes, que emergen en dos escalas diferentes: la macro del paisaje in situ y la micro del paisaje in visu.