Algunas precisiones sobre los macella romanos y
la función del pórtico de sus fachadas

Some details about the Roman macella and the function of their porch
on the façade

Armando Cristilli

Departamento de Prehistoria y Arqueología,

Facultad de Geografía e Historia,

Universidad de Sevilla.

C/ Doña María de Padilla, s/n, 41004 Sevilla.

acristilli@us.es 0000-0001-6669-8809

Resumen El papel tradicional otorgado al pórtico exterior del macellum, el edificio comercial más representativo del mundo romano, como elemento encargado de ocultar al propio mercado, es cuestionado. A diferencia de ello, diferentes ejemplos demuestran que este tipo de pórtico marcó la presencia de los macella en su paisaje urbano por medio de su diseño y decoración. Un análisis más preciso muestra, de hecho, que el pórtico de la fachada fue concebido como un elemento vinculado a la planificación urbana y como reflejo de un sistema integrado más complejo (ciudad, macellum, propaganda visual, ideología, cultura). Por ello, esta característica estructura arquitectónica porticada, en lugar de ocultarlo, destacaba el edificio del mercado romano en su plan urbanístico y permitió así su aprobación y homologación por parte de los ciudadanos.

Palabras clave macellum, pórtico de fachada, ciudades romanas, paisaje urbano.

Abstract The traditional role attributed to the external porch of the macellum (the most representative commercial building in the Roman world) as an element hiding the market building should be revisited. In fact, several examples demonstrate that this type of porch underlined the presence of the macella in their urban landscape by its design and decoration: the porch of the façade was conceived both as an element linked to urban planning and as a representation of a complex system (city, macellum, visual propaganda, ideology, culture). For this reason, this characteristic architectural structure, when it was included in the urban plan, highlighted the building of the Roman market instead of hiding it and allowed its approval and homologation by the citizens.

Keywords Macellum, Porch on the façade, Roman cities, Urban landscape.

Fecha recepción: 17/02/2023 | Fecha aceptación: 13/07/2023

Cristilli, A. (2023): “Algunas precisiones sobre los macella romanos y la función del pórtico de sus fachadas”, Spal, 32.2, pp. 209-228. https://dx.doi.org/10.12795/spal.2023.i32.17

SUMARIO

1. Sobre los pórticos de las fachadas y los macella: el status questionis

2. Observaciones preliminares

3. Los pórticos de las fachadas de los macella: los casos de estudio

4. Conclusiones

Financiación y agradecimientos

Bibliografía

LISTA DE FIGURAS

Figura 1. Gerasa. Plano del macellum (reelaboración a partir de Uscatescu y Martín Bueno, 1997).

Figura 2. Minturno. Plano del área arqueológica (Bianchini, 2011, fig. 1).

Figura 3. Pozzuoli. Plano del macellum (Cristilli, 2015, fig. 3)

Figura 4. Paestum. Plano del foro (Flohr, 2021, fig. 10.4)

Figura 5. Pompeya. Macellum. Pórtico de la fachada (Cristilli, 2008, fig. 11).

Figura 6. Cirene. Plano del macellum (elaboración del autor).

Figura 7. Perge. Macellum (Poupaki, 2011, fig. 1).

Es un hecho ampliamente aceptado que los pórticos siempre han tenido una importancia crucial en la síntesis social y cultural de la arquitectura romana -más evidente aún en el ámbito provincial-, así como que han sabido conservar a lo largo del tiempo esta prerrogativa casi inalterable, incluso ampliándola en ciertos aspectos (Corbeill, 2002; 2004; Frakes, 2009; Dey, 2015, p. 47). En cualquier caso, también parece claro que, a pesar de su especificidad, los pórticos deben reconocerse en su sintaxis proyectual en una relación directa con el propio edificio al que se asocian, independientemente de la tipología arquitectónica de este último, aunque, a menudo, mantengan una identidad autónoma; ignorar este aspecto puede llevar con frecuencia a desafortunadas consideraciones e interpretaciones incorrectas. No se tiene aquí la intención, ni tampoco la necesidad, de agotar tout court, ni de resolver los problemas relativos a los varios aspectos de la historia de la evolución de los pórticos romanos, cosa que requeriría un tratamiento mucho más extenso y que ya ha gozado de gran atención científica. Frente a eso, se pretende proponer una visión alternativa a lo que se ha planteado sobre un subconjunto de esta categoría arquitectónica, como es el pórtico de la fachada del macellum. Este es quizás uno de los edificios romanos más representativos que, una vez más, muestra su participación en la dinámica cultural, histórica, social y económica del mundo romano, manteniendo intacta toda su autonomía y especificidad.

1. Sobre los pórticos de las fachadas y los macella: el status questionis ^ 

El tipo de pórtico que suele emplearse ante las fachadas principales de los macella, objeto de esta reflexión, consiste, al menos en su forma más sencilla, en una fila exterior de columnas que sostiene una cubierta -con menor frecuencia descubierta- y con el estilóbato coincidiendo con el límite de las aceras del forum o con el de la calle a la que se abren estos mismos edificios comerciales. La consideración formulada por Claire de Ruyt (1983, pp. 290-291) sobre este elemento constructivo como estructuralmente separado de estos mercados cubiertos y externo a ellos, casi como si fuera un organismo autónomo, incluso desde el punto de vista arquitectónico, ha vinculado su presencia a una especie de operación consciente de ocultamiento de los macella, dentro de los relativos paisajes urbanos. Casi daba la impresión de un cierto malestar social y al mismo tiempo cultural, producido ante la aceptación de la novedad del tipo arquitectónico por parte de las comunidades ciudadanas; de hecho, el macellum fue, en toda regla, un edificio nuevo en la experiencia arquitectónica propiamente romana. Esta valoración, aunque muy original en diferentes aspectos, fue puesta en cuestión cuando ya se apuntó la posibilidad -aunque excepcional- de que las entradas principales de algunos macella estuvieran marcadas de alguna manera mediante la inserción de columnas de estilo o tamaño diferente a las de los pórticos correspondientes (de Ruyt, 1983, pp. 290-291). De esta forma, precisamente esta aclaración, analizada con mayor detalle, ya contemplaba paradójicamente otro tipo de escenario y, en consecuencia, ha supuesto el punto de partida de una revisión radical de la función y el significado tradicional de estos pórticos. Así, como se verá, esa hipótesis ya no parece ser plenamente válida, más aún a la luz de estudios más recientes.

2. Observaciones preliminares ^ 

Al examinar la cuestión de los pórticos de las fachadas de los macella, conviene realizar algunas observaciones preliminares, sobre todo, con respecto a estos edificios comerciales. Si bien fueron adquiriendo progresivamente significados de fuerte carga ideológica, política y cultural a lo largo de su historia, incluso formando parte de las expresiones más eficaces del proceso de romanización, en el sentido menos impropio del término (Vitelli Casella, 2018, pp. 140-141), como un medio altamente funcional de difundir el modelo de vida urbana por todo el mundo romano (Cristilli, 2015), el macellum nunca perdió su papel fundamental como lugar comercial destinado a los ciudadanos y cuya construcción y desarrollo vinieron determinados por la ciudad correspondiente (de Ruyt, 1983; Cristilli, 1999; de Ruyt, 2000; Torrecilla Aznar, 2007; Cristilli, 2008; Andreau, 2012; Richard, 2014; Cristilli, 2015; 2018; Hoffelinck, 2020, pp. 19-20 y 22; Hoffelinck y Vermeule, 2021, p. 109). La relación que un centro urbano y su área económica establecieron con el macellum local es indispensable para su comprensión global en todos los aspectos: este vínculo, de hecho, es esencial para este edificio, incluida su propia creación, que durante mucho tiempo dependió directamente del rango cívico de la ciudad en la que se encontraba (Cristilli, 2015). También lo es su ubicación, de acuerdo con la afluencia de compradores y vendedores, de modo que permitiera no solo explotar las diferentes perspectivas visuales dentro del urban landscape, sino también satisfacer las necesidades de su pleno funcionamiento como mercado minorista de carnes y pescados (De Angelis et al., 2020). Ello, al margen de su consideración por parte de los estudiosos como indicador de la determinada situación económica de una ciudad en un momento dado de su historia (Odochiciuc, 2017). Debemos considerar que, con el tiempo, el aspecto propagandístico de adherirse al establishment (Cristilli, 2015) llegó incluso, en algunos casos, a prevalecer, como lo demuestra claramente el caso jordano de Gerasa en Arabia Petraea (Uscatescu, 2020, p. 173), quizás uno de los macella más representativos que se conocen, que se presenta como expresión de la lealtad de la comunidad local a Roma (fig. 1). Este mercado, de hecho, presenta un programa ideológico muy bien definido, ya desde su mera posición en el trazado urbano, pero es igualmente obvio que esto se logró a expensas de su función más estrictamente comercial (Cristilli, 2015, pp. 74-76 y 78-79).

Figura 1. Gerasa. Plano del macellum (reelaboración a partir de Uscatescu y Martín Bueno, 1997). ^ 

En cualquier caso, el macellum se reconoce como el monumento destinado al comercio urbano por excelencia en el mundo romano. Actualmente contamos con casi 130 macella, excluyendo, además de los de San Lorenzo di Sebato y de Herculano (Cristilli, 2015, p. 73, n. 42; 2018, p. 76, n. 4), los más recientemente identificados en Gisacum, Trea e Interamna Lirenas (Hoffelinck y Vermeule, 2021, pp. 110-120 y 125-127), aún con datos escasos y sin verificar sobre el terreno. Sí se incluyen las identificaciones más aceptables de los de Falerii Novi en Italia (Hoffelinck y Vermeule, 2021, pp. 112-116) y de Meninx en Túnez (Ritter et al., 2018, pp. 367-368; Ritter y Ben Tahar, 2020, pp. 121-123). Cabe recordar aquí que la mera identificación a partir de una base exclusivamente arquitectónica y planimétrica sigue siendo inválida, ya que es bien sabido que los macella escapan a tipologías estandarizadas y de diseño específico. Por ello son sorprendentes y muy discutibles ciertas definiciones de algunos estudiosos, que les atribuyen un “specific plan” y “specific types”, que los hacen “easy to recognize”, así como postulan la existencia de un “canonical Roman macellum” (Ritter y Ben Tahar, 2020, p. 105; Hoffenlik y Vermeule, 2021, pp. 108-109). No obstante, los mismos autores admitirán, en el mismo lugar (Hoffenlik y Vermeule, 2021, pp. 108-109) un poco más adelante, que “this building type was often characterized by a considerable architectural variety throughout the Roman world, meaning that no two macella were exactly the same” y “most macella had typical layout”.

A continuación, conviene recordar de manera particular otro aspecto relevante: la gran mayoría de los macella suelen estar integrados en sistemas urbanos que no fueron diseñados racionalmente desde su origen. Más aún, es bastante común que se adapten a soluciones urbanísticas preexistentes. En un muy elevado número se construyeron en ciudades consolidadas desde tiempo atrás, de acuerdo con una planificación urbana que ni mucho menos los tuvo en cuenta de cara a su edificación posterior. Por lo tanto, como es fácil de comprender, estos conjuntos se levantaron en puntos previamente ocupados por otras estructuras, públicas y/o residenciales, y sin duda esto, con mucha frecuencia, condicionó los nuevos edificios. El signo más evidente de esta dicotomía suele ser el carácter excéntrico de sus plantas con respecto a los ejes principales del marco urbano en el que se insertan. Las únicas excepciones son los macella que surgieron en zonas del imperio que eran difíciles de controlar como, por ejemplo, Britannia. En esta provincia, aunque fueron construidos después de la creación de sus respectivas ciudades, encajan en los landscapes urbanos correspondientes de forma menos traumática, al adecuarse a espacios ya concebidos y planificados para edificios públicos en el momento de su fundación. En este sentido, el macellum de Viroconium Cornoviorum (Rogers, 2011, pp. 104 y 106; Cristilli, 2015, p. 74; Cleary, 2015, pp. 73-74; Lavan, 2021, p. 916), así como el de Corinium Dobunnorum (Holbrook, 1998, p. 180) aportan ejemplos significativos sobre esto, ya que, aunque construidos en época posterior, destacan por su homogeneidad en sus respectivos tejidos urbanos.

Al margen de la excepcionalidad de algunos ejemplos de la categoría arquitectónica en cuestión, lo más funcional, estético e ideológico que se quisiera destacar se concentró y actualizó enteramente en la parte interna del edificio, que es la que constituye el verdadero macellum. Lamentablemente esta especialización funcional aún se nos escapa y, sobre todo, crea confusión entre algunos estudiosos. Así, por ejemplo, Morel (2001, p. 252) afirma que el macellum podría albergar “ateliers de foulons”, mientras que Marc (2011) plantea la hipótesis de la presencia de talleres de mármol en el supuesto macellum de Thasos. En cualquier caso, era evidente que la articulación de este edificio comercial no podía necesariamente resolverse solo a partir de una dimensión que lo desvinculase de una realidad urbana de la que indudablemente dependía su propia existencia, es decir, encerrándolo desde el exterior en una presunta autonomía práctica y compositiva, dado que, de esta manera, se creaba una contradicción de conceptos. Con esta perspectiva, la posición de Claire de Ruyt (1983, p. 291) resulta algo rígida y limitadora, al separar el pórtico de la fachada de su construcción correspondiente y privando así al macellum de la posibilidad fisiológica y esencial de abrirse al mundo exterior precisamente a través del único elemento capaz de crear un auténtico vínculo comunicativo con el paisaje urbano, es decir, el único en el que el edificio comercial materializaría su completa integración social, cultural y, más aún, económica. En cambio, contrariamente a lo expresado por de Ruyt, en el espacio libre frente a las fachadas principales de los macella, el pórtico parece insertarse de una manera sencilla para conectar el núcleo mismo de los mercados -es decir, lo que realmente los convierte en macella- con el exterior, la ciudad, cumpliendo así un fin funcional específico. Por lo tanto, frente a la tradición de los estudios anteriores, esta estructura parece presentarse como indispensable, precisamente porque inserta los macella en el paisaje arquitectónico circundante de las ciudades en las que se ubican, aunque sea en una fecha posterior a la creación y formación de las últimas, llenando así el inevitable vacío cronológico y visual y permitiendo su pleno sentido en los contextos urbanos correspondientes.

A favor de esta nueva interpretación juegan también la decoración y el diseño de estos pórticos en la fachada. Este factor subyace de la clara voluntad de hacer que los macella se sumen plenamente a los cánones estéticos de las ciudades que los acogen, aunque, obviamente, sin caer nunca en una forma banal de “théâtralisation du decor urbain” de ascendencia microasiática. De hecho, desde un punto de vista técnico-estilístico, el pórtico de la fachada trata de imitar en la medida de lo posible el estilo de los pórticos o columnatas preexistentes de su entorno, utilizando a menudo los mismos materiales y sin renunciar nunca a su función como corredor.

A estos aspectos se suma otra observación, ya mencionada por de Ruyt como se ha indicado anteriormente, a saber, el hecho de que las entradas principales de la mayoría de los macella muestren un especial énfasis por la presencia de columnas que difieren en tamaño y forma estilística del resto, y, con bastante frecuencia, también por escaleras que conducen directamente a la calle o al nivel del foro. En esta investigación se han excluido los ejemplares que sustituyen el pórtico de la fachada por vestíbulos de entrada o chalcidica, aunque monumentales, como es el caso del macellum de Gigthis en Africa Proconsularis (Grebien, 2016, p. 51).

3. Los pórticos de las fachadas de los macella: los casos de estudio ^ 

El número de ejemplares de que disponemos para este análisis concreto es, obviamente, inferior al número total de los macella conocidos, en la medida en que solo se han tenido en consideración los que han conservado los pórticos de la fachada. En algunos casos los datos documentados permiten una reconstrucción filológicamente correcta. No obstante, en muchos de estos edificios, aunque se pueda pensar en la presencia de estos pórticos, no es posible reconstruirlos. Así ocurre en el de Alba Fucens, donde la fachada principal del macellum, a principios del siglo II d.C., estaba precedida por un espacio abierto de 5,50 m de ancho, probablemente correspondiente a un pórtico que se prolongaba hasta la acera (de Ruyt, 1983, p. 32; Lavan, 2021, p. 913). Existen innumerables testimonios de carácter exclusivamente epigráfico. Estos, si bien aluden en algunos casos a las características morfológicas de estos edificios comerciales, a falta de evidencias arqueológicas, no permiten clarificar si se trata de pórticos de fachada o pórticos de los patios interiores. Tampoco proporcionan indicios válidos para su restitución arquitectónica: sirvan de ejemplo la [po]rticum macell[i] de Bézier (de Ruyt, 1983, p. 47) o la portic(us) del mercado de Firmum Apulum (de Ruyt, 1983, p. 72), mientras que sobre las Ʃτοãς ante el macellum de Hermopolis la fuente no aclara su relación con el edificio comercial (Abdelwahed, 2015, p. 39). Parece claro que forzar estos indicios demasiado débiles no respondería a la naturaleza científica de la reconstrucción que aquí se propone, arriesgándose, por el contrario, a una distorsión inútil.

Un primer ejemplo interesante en el grupo de casos válidos a nuestro juicio es, sin duda, el macellum de Minturnae. El edificio se construyó cerca del foro de la ciudad, en la ladera sur de la via Appia -que aquí sirvió como decumanus maximus-, quizás uno de los puntos más cruciales de todo el trazado urbano (fig. 2). Dejó de usarse con funciones comerciales ya antes de la época de los Severos (Cristilli, 2018, p. 72). Su pórtico en la fachada, de piedra caliza gris, estaba formado por dos pilares centrales que sostenían un entablamento no muy alto y diez columnas toscanas, así como toda la parte occidental de la columnata de la via Appia a su paso por la ciudad (Mesolella, 2012, pp. 162-164). El pavimento, ahora desaparecido, probablemente estaba formado por losas de la misma piedra caliza que el pórtico y las demás aceras de su entorno. Presentaba tres escalones de acceso para salvar el desnivel con la calle, hasta alcanzar los bloques del estilobato/acera, en línea con un monumental vestíbulo de entrada al mercado que contenía dos mensae ponderariae (Bellini, 1994, p. 17; 2007, pp. 23-24; Bianchini, 2011, pp. 472-474; 2015, pp. 55-56). Es de interés hacer notar que la planta del edificio no está alineada con la via Appia preexistente, si bien este inconveniente se solucionó brillantemente al insertar una hilera de tabernae abiertas a la calle en la fachada del macellum y al agregar el pórtico que lo conforma. De esta manera el nuevo conjunto se adaptaba perfectamente a los ejes visuales del paisaje urbano, a pesar de ser cronológicamente posterior. No es casualidad, por tanto, que en recientes propuestas (Kreuz, 2021, p. 93) se haya insistido en la identificación del pórtico exterior de este macellum, tal como aparece inserto en la columnata de la via Appia, como una suerte de vestíbulo monumental vestíbulo de entrada al edificio que se encuentra tras él.

Figura 2. Minturno. Plano del área arqueológica (Bianchini, 2011, fig. 1). ^ 

Igualmente interesante es el caso de la fachada del macellum de Pozzuoli, a lo largo del waterfront de la ciudad y con vistas al muelle del antiguo puerto. Presentaba un gran pórtico cubierto con catorce columnas, mientras que su entrada estaba flanqueada y quedaba centrada por dos columnas más, con el fin de crear una grandiosa escenografía acorde con la magnificencia de toda la estructura posterior (Demma, 2007, pp. 77-113; Cristilli, 2015, pp. 72-73). Al mismo tiempo, trataba de establecer una línea de continuidad con el suntuoso alzado de la cella macelli dentro del mercado, a pesar de la interrupción visual de la tholos central (fig. 3).

Figura 3. Pozzuoli. Plano del macellum (Cristilli, 2015, fig. 3) ^ 

La misma situación parece repetirse, aunque con formas menos teatrales, en el pórtico de la fachada del mercado de Aquincum en Pannonia Inferior. Se encuentra abierto al cardo maximus, donde, a pesar de la falta de otros elementos en los puntos estructurales más significativos, dos columnas más altas están dispuestas en eje con la entrada principal del edificio (de Ruyt, 1983, pp. 37-42; Láng, 2007; Láng et al., 2014).

Como era de esperar, en coherencia con la naturaleza versátil del macellum, las soluciones arquitectónicas que se documentan pueden llegar a ser muy diversas -no solo en un sentido formal y estético-, si bien su función comunicativa e integradora siempre termina aflorando, como demuestran los casos que a continuación se tratan.

En el ejemplo de Ostia, la entrada principal, centrada, está subrayada por dos altas columnas corintias de granito gris, adosadas al centro del pórtico de pilares en la fachada. Aquí, no obstante, se sitúan directamente sobre el pavimento del decumanus maximus, con el alzado notablemente adelantado en la entrada del edificio (Andreau, 2012, p. 77; Marini Recchia, 2014; Cristilli, 2015, p. 71; Pavolini, 2016, pp. 220 y 226-228; contra Broisch-Höhner et al., 2017).

En el frente principal del macellum en el foro de Paestum se situaba un pórtico que, a su vez, con toda probabilidad, duplicaba el de la plaza pública (fig. 4). Exactamente en el centro de este edificio, la entrada al mercado quedaba destacada por una escalera delimitada por dos basamentos reutilizados sobre los que descansaban otras tantas columnas (de Ruyt, 2000, p. 178).

Figura 4. Paestum. Plano del foro (Flohr, 2021, fig. 10.4) ^ 

Algo semejante se documenta en Herdonia (de Ruyt, 1983, pp. 80-88), aunque allí es probable plantear formas más atenuadas de desarrollo arquitectónico. El brazo sur de la columnata de la plaza pública se utiliza como pórtico en la fachada del macellum que, de esta forma, aseguró la homogenización estética con los demás edificios públicos contiguos. Atribuible a este mismo grupo, aunque solo como hipótesis de trabajo, también sería el mercado de Ağlasum en Pisidia (de Ruyt, 1983, pp. 188-190; Richard y Waelkens, 2012; Richard, 2014, pp. 259-261, 265 y 267-271; Poblome et al., 2020, p. 34; Lavan, 2021, pp. 908-910 y 914-915).

Más enfático resulta el pórtico de la fachada del macellum hispano de Baelo Claudia (Baetica), abierto al decumanus maximus, al que se accedía directamente a través de tres escalones alineados con la entrada principal del edificio (Torrecilla Aznar, 2007, pp. 466-469). Esto resulta especialmente significativo si tenemos en cuenta que el desarrollo del patio interior del conjunto reduce el pórtico interior a una suerte de estrecho dosel sostenido por la secuencia de semicolumnas entre las tiendas debido, sin duda, al limitado espacio disponible. Una solución análoga se puede asimismo plantear como hipótesis para el pórtico interior del macellum de Colonia Iulia Equestris en la Gallia Belgica (de Ruyt, 2000, p. 183).

También los restos del pórtico del macellum de Saepinum, en cuya entrada -marcada por un par de columnas o, quizá, por dos pilastras- hay tres peldaños bajos que conectan con el opuesto decumanus maximus, indican una cierta forma de monumentalización de su estructura arquitectónica, acentuada además por el nivel del estilóbato, más alto que el pavimento de la calle (Lanteri, 2013-2014, pp. 44-47; Ciliberto, 2015; Ciliberto y Guidi, 2017, p. 22; Cristilli, 2018, p. 78; Lavan, 2021, p. 913). En Philippi (Macedonia) la fachada principal del conjunto del mercado con sus tres puertas de acceso estaba subrayada por un pórtico de seis columnas corintias con dos grandes basamentos entre las puertas de los muros laterales (de Ruyt, 1983, pp. 133-136; Gros, 1996, p. 463; Bond, 2022, pp. 165 y 169-172). Una gran columnata pavimentada con piedra caliza y precedida por una escalera de cuatro peldaños llevaba a las tres entradas principales del mercado tunecino de Bulla Regia en Africa Proconsularis (de Ruyt, 1983, pp. 49-50; Lavan, 2021, p. 916). La fachada principal del cardo maximus del citado macellum de Viroconium Cornoviorum estaba precedida por un pórtico accesible desde la calle mediante unos peldaños (de Ruyt, 1983, p. 220), como quizás sea concebible también para el de Ginebra (Gallia Narbonensis), que aún conserva el tosco mosaico de piedra del pavimento (de Ruyt, 1983, p. 73; Lavan, 2021, p. 903). En Hippo Regius, a pesar de la presencia desde el siglo IV d.C. de un imponente vestíbulo con columnatas que anteriormente era un llamativo acceso al macellum local (de Ruyt, 1983, p. 91), no se renuncia a colocar un pórtico frente a todo el conjunto abierto a la calle.

En esta secuencia de ejemplos, otro caso de estudio muy útil y decisivo para los propósitos de este trabajo es el ya mencionado macellum de Gerasa (fig. 1), construido cerca de la llamada “place oval” y abierto al cardo maximus (Olavarri Goicoechea, 1986; Martín-Bueno, 1989; Martín-Bueno, 1992; Martín-Bueno y Uscatescu, 1994, p. 171; Uscatescu y Martín-Bueno, 1997; de Ruyt, 2000, pp. 178-179; Cristilli, 2015, pp. 74-76 y 78-79), sobre todo, porque su pórtico exterior permite que el conjunto alcance un alto nivel de visibilidad y, por tanto, de clara identificación con el paisaje de la antigua ciudad. La columnata de la fachada principal, cerrada lateralmente por dos puertas decoradas y otras tantas fuentes, tiene dieciséis columnas corintias sobre plintos bajos. Entre cada columna terminal y la puerta correspondiente hay dos escaleras que permiten el acceso desde la calle, mientras que las cuatro columnas centrales de la entrada principal del edificio, decoradas con capiteles ricamente esculpidos, de diámetro y altura superior a los demás, soportan un entablamento superior. La diferencia de altura con los restantes entablamentos laterales se resuelve intercalando dos ménsulas en el fuste de las columnas inmediatamente adyacentes. El pavimento es de losas de piedra caliza rosada local. Por último, en línea con el acceso principal al edificio, tres escalones descienden al firme empedrado del cardo maximus (Seigne, 2008, pp. 40-44). El pórtico de este mercado, de fuerte impacto estético-arquitectónico, forma parte de la larga columnata que bordea la imponente vía del cardo en el tramo comprendido entre la helenística “place oval” -que en época romana también servía de foro de la colonia- y el Tetrapylon Norte. Se trata de una columnata corintia que había sustituido a la anterior jónica del siglo I d.C. y que aún se conserva en el tramo norte del cardo entre el Tetrapylon Norte y la Puerta Norte (Khouri, 1986, pp. 67-68; Seigne, 1992, p. 335; Rababeha et al., 2014). La sustitución del orden jónico por columnas corintias debe situarse a finales de la época de Adriano y habría comenzado desde la “place oval” y continuado en dirección norte, dentro de un proyecto de renovación urbana que transformará progresivamente todo el cardo maximus, en torno a los años 125-160 d.C., para luego interrumpirse, por alguna razón que se nos escapa, en su parte norte (Seigne, 1992, p. 335; Martín-Bueno y Uscatescu, 1994, p. 173; Uscatescu y Martín-Bueno, 1997). Por lo tanto, dado que la construcción del macellum parecería haber tenido lugar cuando ya se habían realizado estas modificaciones o, como mucho, poco antes, es muy plausible que sus constructores lo concibieran desde el principio del gran proyecto de remodelación urbana. Huelga recordar aquí que la construcción del mercado y su pórtico está ligada a la visita que el emperador Adriano realizó a Gerasa en los años 129-130 d.C., es decir, en un momento en el que probablemente la ciudad tenía una mayor necesidad de presentarse como fiel a Roma. Es por ello que el macellum destaca su presencia en el exterior, no sólo con las dimensiones de las columnas centrales de su pórtico de la fachada, sino incluso con su particular decoración. El macellum, una excentricidad arquitectónica en el trasfondo cultural de Gerasa de clara ascendencia helenístico-oriental, pero al mismo tiempo expresión más que evidente de romanitas, se convierte en un signum perfectamente adaptado a las necesidades de la ocasión (Cristilli, 2015, pp. 74-76 y 78-79).

En Pompeya, en cambio, el elegante pórtico corintio de fustes estriados de la fachada principal del macellum (Cristilli, 2008; Moormann, 2011, pp. 137-139; Kleineberg, 2021, pp. 85-86) se destaca claramente de los pórticos dórico-toscanos que bordean el foro (fig. 5). No obstante, una vez más la falta de alineación entre el mercado y la plaza, debido a que el edificio se ajustaba al desarrollo no ortogonal de la “Via degli Augustali” al foro (contra Flohr, 2021, pp. 217-218), exactamente como en Minturno, se resuelve de manera coherente también gracias a este pórtico. De hecho, el espacio en forma de cuña que se había creado a causa de la no coincidencia en los ejes se resuelve con el pórtico de la fachada y una hilera de habitaciones comerciales de profundidad decreciente que se abren a la plaza bajo un pórtico común. La elección de esta solución estructural “pórtico de la fachada - tabernae exteriores” hay que situarla en la época de Nerón, aunque no sabemos con certeza si su fundación se produjo antes o después del terremoto del 62 d.C. Sin embargo, es importante subrayar que el pórtico exterior del macellum pompeyano se presenta como absolutamente original entre los del foro de la ciudad, utilizando, como lo hace, diferentes materiales, planta y soluciones estéticas, pero siempre sin interrumpir su fuerte función social. Este último aspecto está claramente señalado por las bases de estatuas colocadas, por dentro, contra cada una de las columnas del pórtico de la fachada. Se deduce que, a través de su monumentalización, como bien subrayó J. Dobbins (1994, p. 630), “was given special emphasis” a este pórtico. Recientemente Benaïch (2022) ha planteado la hipótesis de interpretar este pórtico como indicador del culto imperial administrado dentro del macellum pompeyano, lo que, a nuestro juicio, supone una contribución más a la formulación estética de la fachada principal del edificio comercial.

Figura 5. Pompeya. Macellum. Pórtico de la fachada (Cristilli, 2008, fig. 11). ^ 

En la misma línea funcional del pórtico en la fachada del macellum de Pompeya también existen otros ejemplos. El mercado de Dougga (Africa Proconsularis), construido en el año 54 d.C. por M. Licinius Rufus como patronus pagi, está equipado con un hermoso pórtico en el frente, con diez columnas y tres escaleras que conducen a la llamada “Piazza della Rosa dei Venti” (de Ruyt, 1983, pp. 212-218; Khanoussi, 2003, p. 148; Underwood, 2019, pp. 290-291; Fentress, 2021, p. 189). En Timgad, también en Africa Proconsularis, el llamado macellum “de Sertius” (de La Iglesia y Márquez Moreno, 1991) prevé la entrada principal flanqueada por las dos bases de las estatuas de los Sertii (Gilhaus, 2013, p. 24), los verdaderos “protagonists at Severan Timgad” (Fentress, 2021, p. 191), colocadas bajo el pórtico columnado en la fachada, a su vez precedido por un área trapezoidal conectada con el decumanus maximus. Frente a ello, no es posible utilizar como ejemplo el pórtico en la fachada del llamado “mercado central”, el otro macellum de Timgad, pues la elevada altura de la acera-estilóbato parece estar condicionada por la pendiente del lugar más que por un diseño intencionado del proyecto (de Ruyt, 1983, p. 203; Grebien, 2016). Una situación muy similar a la del macellum de Sertius, aunque menos acentuada, la ofrece el pórtico del mercado de Cuicul en Numidia, construido entre los años 138 y 161 d.C. Está dotado de columnas lisas y tres vanos alineados con el acceso principal que conducen al nivel del cardo maximus (de Ruyt, 1983, pp. 64-66; Riadh Hamrouni y Naddari, 2018, p. 92). Aquí también la columnata en la fachada señala la presencia del edificio, solo que al mismo tiempo también lo convierte en el lugar privilegiado para que los hermanos Cosinii dieran a conocer las liberalidades de su familia a través de sus retratos allí alojados (de Ruyt, 1983, p. 67; Zimmer, 1992, p. 313; Láng, 2007; Lepore, 2011, pp. 6-8). Estas iniciativas evergéticas incluían el pago de 30.000 sestercios para la construcción del propio mercado en f[un]d[amentis] a cargo de Lucius Cosinius Primus.

El estadio final de este fenómeno, incluso en términos cronológicos, lo supone el pórtico exterior del macellum de Cirene (Creta et Cyrenaica), un edificio conectado directamente con la terraza superior del ágora a través de la llamada “Stepped Street”. Se abría igualmente a la llamada “Valley Street” (fig. 6), la calzada que constituye el nuevo punto de atracción del plan urbanístico de la ciudad romana, así como escenario privilegiado para demostrar la adhesión cultural de los ciudadanos a la romanización (Ward Perkins y Gibson, 1976-1977; Reynolds, 1976-1977; Sear, 2006, pp. 292-293; Cristilli, 2015, p. 76). Desconocemos si la fachada principal del macellum estuvo precedida desde un principio por un cuerpo arquitectónico diferenciado, si bien al menos en época de Adriano se construyó en su frente un pórtico con columnas lisas de mármol proconesio sobre basas áticas, con capiteles corintios y acompañado de una serie de escalones que conectan con el nivel pavimentado de la “Valley Street”. Además, durante el principado de Septimio Severo (195-198 d.C.) se erigió un propileo monumental en la parte oriental del pórtico de Adriano, aprovechando el estilóbato de este último y, muy probablemente, intercalando pilares en los puntos de unión (Reynolds, 1976-1977, p. 375). La estructura constaba de cuatro columnas helicoidales de piedra caliza local, más altas que las de la columnata del pórtico, colocadas sobre basas áticas y rematadas por ricos capiteles corintios con prótomos antropomorfos que sostenían un arquitrabe inscrito decorado con una escena de batalla. La estructura se completaba en la parte superior con un grupo ecuestre de bronce que representaba a Septimio Severo y su familia, ahora desaparecido. Cabe recordar a este respecto que Stucchi (1975, p. 273, n. 2) planteó la hipótesis de que el grupo de bronce nunca hubiera completado el ático del propylaeum, sino que se hubiera colocado bajo esta estructura; en su opinión, su techo tenía una superficie demasiado pequeña. La alternativa de Stucchi es discutible: el grupo escultórico mencionado en el epígrafe pudo no haber sido demasiado pretencioso en tamaño y, por tanto, fácilmente adaptable a la superficie del ático, que parece un lugar más funcional. Si bien posterior a la fecha de construcción del macellum, el pórtico exterior marca claramente la presencia del mercado y también documenta, desde finales del siglo II d.C., el papel de este último como importante punto estratégico para demostrar toda la lealtad de la colonia a la familia imperial y al Estado romano.

Figura 6. Cirene. Plano del macellum (elaboración del autor). ^ 

Los casos de estudio examinados hasta ahora y, de forma más general, su característico tipo de organización arquitectónica, proponen el pórtico de la fachada de los macella romanos como una eficaz y decisiva opción para resaltar la presencia de estos edificios comerciales, reclamando para sí mismos una plena independencia y conservando la idea de una homologación urbanística casi total. De hecho, este tipo de pórtico, a su vez, también respondía a las necesidades estéticas del contexto local, ofreciendo una variedad de soluciones artísticas y técnicas completamente dependientes del trasfondo cultural de su ciudad en el momento de la construcción del macellum. Esto, sin duda, justifica la pluralidad de resultados estilísticos. También las necesidades, comportamientos y expectativas de los usuarios debieron de condicionar su diseño. Su resolución formal y estética, de hecho, dependía formalmente del gusto artístico local en el momento de la construcción del edificio comercial, pero nunca carente de funcionalidad para no parecer superfluo. Una vez más, emerge toda la versatilidad que permiten identificar las peculiaridades esenciales del edificio del macellum, que logra cargarse de mensajes cada vez más complejos y articulados, sin perder del todo su función económica primaria (Cristilli, 2015). Si, por un lado, la consecuencia es que es muy difícil encontrarnos ante un único modelo estético-estilístico, por otro, todos los ejemplos indicados -y no solo- atestiguan explícitamente la centralidad del mercado romano en un proyecto ideal de intercambio económico y cultural con la ciudad; de manera igualmente evidente, también su deseo de ser aprobado por los ciudadanos e integrado con naturalidad dentro del tejido urbano. En un análisis con mayor detalle, el pórtico de la fachada es reconocible como un elemento vital para la cohesión social de los propios macella, representando un verdadero punto de fuerza más que de criticidad y, especialmente, de un medio de separación. Se propone también como un lugar de promoción y de participación directa y activa con los destinatarios implicados, para colaborar en su plena integración en la red económica territorial.

Una última prueba clara adicional la supone el macellum de Perge en Pamphilia (Poupaki, 2011; Işıklıkaya-Laubscher, 2011; Richards, 2014, pp. 259, 261-263 y 265-271; Cristilli, 2015, pp. 77-78; Çokay Kepçe, 2018, p. 13), incluido en un importante proyecto de remodelación urbana en las mismas décadas que el construido en Gerasa, es decir, entre los años 20 del siglo I d.C. y el principado de Cómodo. En este período la antigua ciudad microasiática, también en espera de una visita personal de Adriano en 121-122 d.C., que solo llegó a materializarse diez año después con motivo de su segundo viaje a Oriente, restauró sus antiguos edificios y construyó otros nuevos como muestra de romanización y de lealtad al Imperio (Cristilli, 2015, pp. 77-78). Entre los nuevos edificios de la ciudad, de hecho, se encuentra el macellum, ubicado al este de la “puerta helenística”, en la calle principal de la ciudad. Aunque fechado a finales de la época antonina, parece demostrado que, desde el punto de vista del diseño y composición general, que ya estaba previsto en el proyecto de remodelación del periodo adrianeo. Lo que más nos interesa aquí es que en la fachada del edificio del mercado hay una columnata, rematada por los mismos capiteles jónicos proconesios que decoran las columnas de las viae porticatae del entorno (fig. 7). Este tipo de capiteles, de hecho, también se utiliza para decorar las columnas del pórtico del patio interior del macellum (Cristilli, 2015, pp. 77-78). Así, si, por un lado, el pórtico de la fachada de este conjunto se ajusta al decoro urbano a pesar de su cronología más reciente, por otro, muestra una fuerte voluntad de apertura al exterior, interiorizando también el aparato ornamental en una relación de recíproca correspondencia, podríamos decir, entre dentro y fuera, claramente en el continuo esfuerzo por no escapar a la mirada desde el exterior.

Figura 7. Perge. Macellum (Poupaki, 2011, fig. 1). ^ 

4. Conclusiones ^ 

La premisa inicial de la investigación, es decir, la de la existencia de un pórtico/columnata exterior que enmascaraba el núcleo constructivo del macellum propiamente dicho, resultó más que cuestionable. Las pruebas, de hecho, han puesto de manifiesto la importancia de entender esta estructura como soporte del proceso de integración del mercado romano en el medio socio-cultural de las ciudades en cuestión. No es, por tanto, una herramienta de ocultación y aceptación discreta, sino un elemento que fue concebido para subrayar de manera más que evidente el acceso al macellum desde la vía principal o desde el foro, para acelerar su contextualización. No obstante, también ha sido reconocido como de fuerte valor social e ideológico, una especificidad que crece con el tiempo hasta convertirse en un objeto de monumentalización y un urban hot spot para exhibir estatuas honoríficas y lanzar mensajes específicos. El pórtico de la fachada de los macella, en estos términos, debe entenderse más como un Konzept espacial vinculado al urbanismo, una especie de representación simbólica estructurada e incorporada como parte de un sistema integrado más complejo. Teniendo en cuenta todos los datos recogidos sobre arquitectura, soluciones estética y cronología, es evidente que este tipo de pórtico se elaboró según una perspectiva romana bien definida, lo que confirma aún más el favor otorgado a la construcción del macellum y su inclusión en el paisaje urbano de forma poco traumática.

Se acepta que en un momento inicial la introducción forzada del nuevo edificio en el contexto cultural y arquitectónico tradicional de Roma debió de provocar, naturalmente, algunas dificultades para su aceptación por parte del público. No obstante, pronto la transformación del pórtico de la fachada supuso una oportunidad para que el macellum se destacara a través de las formas y la función social y cultural de este último, papel que nunca estuvo ausente hasta el final del uso de este edificio comercial. En la práctica, no existe evolución en la idea de la conexión entre la ciudad y el macellum a través de su pórtico de la fachada, ya que la estructura nació desde el principio asociada al edificio correspondiente y nunca dejó de desempeñar este papel. Se entiende, no obstante, que estos pórticos cumplían siempre su función de “indicadores” de la presencia física de los macella y de sus actividades, dejando que estas últimas se realizasen con rigor dentro de los complejos.

Sin embargo, la distribución geográfica de los casos mencionados y su rango cronológico, aspectos quizá poco tenidos en cuenta hasta el momento, pueden resaltar cómo la función del pórtico en la fachada como expresión exterior del macellum fue una constante siempre y en todas partes del Imperio romano durante su historia -al menos hasta el siglo IV d.C.-. Su función no varía ni depende de la forma, ni de la cronología, ni del lugar, ni mucho menos de restauración alguna.

Financiación y agradecimientos ^ 

Este estudio se ha realizado en el marco del contrato “Ayuda María Zambrano para la recualificación del sistema universitario español - Universidad de Sevilla (289/2021)”, disfrutado por el autor. Un primer resultado de la investigación se presentó en la Landscape Archaeology Conference (LAC), celebrada en Newcastle y Durham (Reino Unido) del 17 al 20 de octubre de 2018, pero precisaba una revisión más amplia y razonada, que es la que aquí se presenta.

Bibliografía ^ 

Abdelwahed, Y. E. H (2015) Egyptian Cultural Identity in the Architecture of Roman Egypt (30 BC - AD 325). Oxford: Archaeopress.

Andreau, J. (2012) “Quelques observations sur les macella”, en Chankowski, V. y Karvonis, P. (eds.) Tout vendre, tout acheter: structures et équipements des marchés antiques, Scripta Antiqua. Pessac: Ausonius éditions, pp. 75-82.

Bellini, G. R. (1994) Minturnae. L’area archeologica. Marina di Minturno: Ministero per i Beni culturali.

Bellini, G. R. (2007) “Minturnae porto del Mediterraneo”, Romula, 6, pp. 7-28.

Benaïch, M. (2022) “Tra apertura e chiusura. Percezione e impatto visivo del culto imperiale nel paesaggio urbano italiano: uno studio delle aree di accesso e delle facciate degli edifici di culto”, en Cristilli, A., De Luca, F., Di Luca, G. y Gonfloni, A. (eds.) Experiencing the Landscape in Antiquity 2, BAR Series, vol. 3107. Oxford: Archaeopress, pp. 363-371. https://doi.org/10.30861/9781407360096

Bianchini, M. (2011) “Rilievi e analisi di alcuni edifici di Minturnae. I risultati delle tesi di laurea degli studenti della Seconda Università di Napoli”, en Ghini, G. y Mari, Z. (eds.) Lazio e Sabina. 8, Atti del Convegno. Roma 30-31 marzo, 1 aprile 2011. Roma: Edizioni Quasar, pp. 465-475.

Bianchini, M. (2015), “Rilievi e ricerche a Minturnae: Basilica, Curia, Ponderarium, Terme e Teatro”, en Bellini, G. R. y von Hesberg, H. (eds.) Minturnae. Nuovi contributi alla conoscenza della Forma Urbis. Giornata di studio sui lavori a Minturnae in collaborazione con la Seconda Università degli Studi di Napoli Facoltà di Lettere e Filosofia. Roma - 29 settembre 2011. Roma: Edizioni Quasar, pp. 43-57.

Bond, S. (2022) “Maintaining the City: Enslaved Labor and Trade in Roman Philippi”, en Friesen S. J., Lychounas, M. y Schowalter, D. N. (eds.) Philippi, From Colonia Augusta to Communitas Christiana. Religion and Society in Transition. Leiden-Boston: Brill, pp. 163-182.

Broisch-Höhner, M., Kockel, V. y Ortisi, S. (2017) “Das sog. Macellum von Ostia - Radaruntersuchung 2015”, Kölner und Bonner Archaeologica (KuBA), 7, pp. 91-98.

Ciliberto, F. (2015) “Nugae sepinati I. Il macellum di Sepino: una puntualizzazione”, LANX. Scuola di Specializzazione in Beni Archeologici dell’Università degli Studi di Milano, 21, pp. 41-53.

Ciliberto, F. y Guidi, A. (2017) “Nugae sepinati II. Le pavimentazioni del macellum di Saepinum - Altilia”, en XXII Colloquio Associazione Italiana per lo Studio e la Conservazione del Mosaico (AISCOM), Matera, 16-19 marzo 2016. Tivoli: Edizioni Scripta Manent, pp. 37-48.

Cleary, S. E. (2015) “Public buildings in the cities of Roman Britain: successes or failures?”, en Brassous, L. y Quevedo, A. (eds.) Urbanisme civique en temps de crise. Les espaces publics d’Hispanie et de l’Occident romain entre le IIe et le IVe siècle, Collection de la Casa de Velázquez 149. Madrid: Casa de Velázquez, pp. 63-82.

Çokay Kepçe, S. (2018) “Yeni Araştırmalar Işığında Perge Macellumu Hakkında Gözlemler”, Mimarlar Arkeologlar Sanat Tarihçileri Restoratörler Ortak Platformu E-Dergisi, 12 (1), pp. 10-21.

Corbeill, A. (2002) “Political Movement: Walking and Ideology in Republic Rome”, en Frederick, D. (ed.) The Roman Gaze: Vision, Power and the Body. Baltimore: Johns Hopkins University Press, pp. 182-215.

Corbeill, A. (2004) Nature Embodied: Gesture in Ancient Rome. Princeton: Princeton University Press.

Cristilli, A. (1999) “Il complesso di Za Rodinu: apatouron o macellum?”, Rendiconti della Accademia di archeologia, lettere e belle arti di Napoli, 68, pp. 53-67.

Cristilli, A. (2008) “Tra evergetismo e culto imperiale. Le statue-ritratto dal macellum di Pompei”, Rivista di Studi Pompeiani, 19, pp. 35-43.

Cristilli, A. (2015) “Macellum and Imperium. The relationship between the Roman State and the market-building construction”, Analysis Archaeologica, 1, pp. 69-86.

Cristilli, A. (2018) “Reusing and kinds of reusing of a Roman commercial space in Late Antique Latin West: the macellum case study”, Analysis Archaeologica, 4, pp. 71-83.

De Angelis, F., Varano, S., Battistini, A., Di Giannantonio, S., Ricci, P., Lubritto, C., Facchin, G., Brancazi, L., Santangeli-Valenzani, R., Catalano, P., Gazzaniga, V., Rickards, O., Martínez-Labarga, C. (2020) “Food at the heart of the Empire: dietary reconstruction for Imperial Rome inhabitants”, Archaeological and Anthropological Sciences, 12: 244. Accesible en https://link.springer.com/article/10.1007/s12520-020-01194-z (consultado 10 mayo 2023).

De la Iglesia, M. A. y Márquez Moreno, C. (1991) “El mercado de Sertius en Timgad”, en L’Africa Romana, VIII Convegno, (Cagliari, 14-16 dicembre 1990). Sassari: Edizioni Gallizzi, pp. 373-383.

Demma, F. (2007) Monumenti pubblici di Puteoli. Roma: L’Erma di Bretschneider.

De Ruyt, Cl. (1983) Macellum. Marché alimentaire des Romains. Louvain: Institut supérieur d’archéologie et d’histoire de l’art, Collège Érasme.

De Ruyt, Cl. (2000) “Exigences fonctionnelles et variété des interprétations dans l’architecture des macella du monde romain”, en Lo Cascio, E. (ed.) Mercati permanenti e mercati periodici nel mondo romano - Incontri capresi di storia dell’economia antica. Capri, 13-15 ottobre 1997. Bari: Edipuglia, pp. 177-186.

Dey, H. W. (2015) The Afterlife of the Roman City. Architecture and Ceremony in Late Antiquity and the Early Middle Ages. Cambridge: Cambridge University Press.

Dobbins, J. J. (1994) “Problems of Chronology, Decoration, and Urban Design in the Forum at Pompeii”, American Journal of Archaeology, 98, pp. 629-694.

Fentress, E. (2021) “Sacred transactions. Religion and markets in Roman urbanism”, en Flohr, M. (ed.) Urban space and urban history in the Roman world. London: Routledge, pp. 179-197. https://doi.org/10.4324/9780367809331

Flohr, M. (2021) “Fora and commerce in Roman Italy”, en Flohr, M. (ed.) Urban Space and Urban History in the Roman World. London: Routledge, pp. 198-220. https://doi.org/10.4324/9780367809331

Frakes, J. F. D. (2009) Framing Public Life: The Portico in Roman Gaul. Wien: Phoibos.

Gilhaus, L. (2013) “Equites and senators as agents of change: urban culture and elite self-representation in Thamugadi and Lepcis Magna (second-third centuries A.D.)”, en Bokern, A., Bolder-Boos, M., Krmnicek, S., Maschek, D. y Page, S. (eds.) TRAC 2012: Proceedings of the twenty-second annual theoretical Roman archaeology conference, Frankfurt, 29 March - 1 April 2012. Oxford: Oxbow Books, pp. 21-36. https://doi.org/0.16995/TRAC2012_21_36

Grebien, M. (2016) “Das Macellum von Gigthis, eine Imitation der Trajansmärkte in Rom?”, en Koiner, G. y Lohner-Urban, U. (eds.) “Ich bin dann mal weg. Festschrift für einen Reisenden Thuri Lorenz zum 85. Geburtstag. Wien: Phoibos, pp. 51-55.

Gros, P. (1996), L’architecture romaine du début du IIIe siècle av. J.-C. à la fin du Haut-Empire. 1. Les monuments publics. Paris: Picard.

Hoffelinck, A. (2020) “New light on the commercial landscape of Roman cities: the contribution of non-invasive survey”, en Flohr, M. y Monteix, N. (eds.) Archaeology and economy in the ancient world. 42. Heidelberg: Propylaeum, pp. 17-30. https://doi.org/10.11588/propylaeum.573

Hoffelinck, A. y Vermeule, F. (2021) “Ubi sunt macella? The Contribution of Non-Invasive Archaeology Survey to the Identification and Study of Roman Food Markets”, Oxford Journal of Archaeology, 40 (1), pp. 105-133. https://doi.org/10.1111/ojoa.12260

Holbrook, N. (1998) Cirencester: The Roman town defences, public-buildings and shops. Cirencester: Cotswold Archaeological Trust Ltd.

Holleran, C. (2012) Shopping in Ancient Rome: the Retail Trade in the Late Republic and the Principate. Oxford: Oxford University Press.

Işıklıkaya-Laubscher, I. R. (2011) “Mosaics in Perge: preliminary report on the mosaics of the macellum”, en Şahin, M. (ed.) 11th International colloquium on ancient mosaics, october 16th- 20th, 2009, Bursa Turkey. Mosaics of Turkey and parallel developments in the rest of the ancient and medieval world: questions on iconography, style and technique from the beginnings of mosaic until the Late Byzantine Era. Istanbul: Ege Yayinlari, pp. 467-481.

Khanoussi, M. (2003) “L’évolution urbaine de Thugga (Dougga) en Afrique proconsulaire: de l’agglomération numide à la ville africo-romaine”, Comptes rendus de l’Académie des Inscriptions et Belles-Lettres, 147 (1), pp. 131-155.

Khouri, R. G. (1986) Jerash. A frontier city of Roman east. London - New York: Longmann.

Kleineberg, A. (2021) “The Capitolium at Brescia in the Flavian Period”, en Haug, A. y Taylor Lauritsen, M. (eds.) Décor. Decorative Principles in Late Republican and Early Imperial Italy. 2. Principles of Decoration in the Roman World. Berlin - Boston: De Gruyter, pp. 71-90. https://doi.org/10.1515/9783110732139

Kreuz, P.-A. (2021) “Topographical permeability and the dynamics of public space in Roman Minturnae”, en Flohr, M. (ed.) Urban space and urban history in the roman world. London: Routledge, pp. 89-110. https://doi.org/10.4324/9780367809331

Láng, O. (2007) “Did the Cosinii build macella? The possible builder of the macellum in Aquincum”, en Mayer, M., Baratta, G. y Almagro, A. G. (eds.) Acta XII Congressus Internationalis Epigraphiae Graecae et Latinae. Barcelona: Institut d’Estudis Catalans, pp. 817-830.

Láng, O., Nagy, A. y Vámos, P. (eds.) (2014) The Aquincum Macellum. Researches in the area of the macellum in the Aquincum Civil Town (1882-1965). Applying news methods for old excavation materials, Aquincum Nostrum I.3. Budapest: Budapest History Museum.

Lanteri, L. (2013) “Una metodologia per l’analisi metrologica e progettuale dei macella romani”, SALDVIE. Estudios de prehistoria y arqueología, 13-14, pp. 41-51. https://doi.org/10.26754/ojs_salduie/sald.201413-146647

Lavan, L. (2021) Public Space in the Late Antique City. Leiden - Boston: Brill. https://doi.org/10.1163/9789004423824

Lepore, P. (2011) “Alcune osservazioni lessicali ed esegetiche in tema di «taxatio» nelle fonti epigrafiche”, Rivista di Diritto Romano, 11, pp. 1-16.

Marc, J. Y. (2011) “Thasos. Les abords Sud de l’agora”, Bulletin de Correspondance Hellénique, 135 (2), pp. 517-534. https://doi.org/10.1109/18.382026

Marini Recchia, F. (2014) “Nuove ricongiunzioni epigrafiche ostiensi. Il macellum di Nymphodotus e Pothus”, Mélanges de l’École française de Rome - Antiquité, 126 (1), pp. 69-82. https://doi.org/10.4000/mefra.12610

Martín-Bueno, M. (1989) “Notes préliminaires sur le macellum de Gerasa”, Syria. Archéologie, art et histoire, 66, pp. 177-199.

Martín-Bueno, M. (1992) “Gerasa de la Decapolis”, Empúries: revista de món clàssic i antiguitat tardana, 48-50, pp. 78-83.

Martín-Bueno, M. y Uscatescu, A. (1994) “El macellum de Gerasa (Ýaras, Jordania): la transformación de un edificio público romano en un área artesanal bizantina”, Boletín del Seminario de Estudios de Arte y Arqueología, 60, pp. 171-185.

Mesolella, G. (2012), La decorazione architettonica di Minturnae Formiae Tarracina. L’età augustea e giulio-claudia. Roma: L’Erma di Bretschneider.

Morel, J.-P. (2001) “Artisanat et manufacture à Rome (Ier s. n. av. è.-IIe de n. é.)”, Pallas, 55, pp. 243-263.

Odochiciuc, A. (2017) “Contribution sur le macellum d’Histria”, Studia Antiqua et Archaeologica, 22 (2), pp. 195-201. https://doi.org/10.47743/saa-2021-27-1-11

Olavarri Goicoechea, E. (1986) “Excavaciones en el edificio público romano junto al Cardo Maximus”, en Zayadine, F. (ed.) Gerasa Archaeological Project, I, Amman, pp. 461-491.

Pavolini, C. (2016) “A survey of excavations and studies on Ostia (2004–2014)”, Journal of Roman Studies, 106, pp. 199-236.

Poblome, J., Willet, R. y Leder-Slotman, D. (2020) “Work/Shop Till You Drop. Reflections on (Work)Shops and Associated People from Hellenistic to Roman Imperial Pisidia”, en Flohr, M. y Monteix, N. (eds.) Shops, Workshops and Urban Economic History in the Roman World. Heidelberg: Propylaeum, pp. 31-38. https://doi.org/10.11588/propylaeum.573

Poupaki, E. (2011) “The macellum of Perge: new aspects on its building material”, en Ghiannikouri, A. (ed.) The agorà in the Mediterranean from Homeric to Roman times. International conference, Kos 14-17 April 2011. Athens: Archaiologikó Institoúto Aigaiakṓn Spoudṓn, pp. 279-293.

Rababeha, S., Al Rabadyb, R. y Abu-Khafaj, S. (2014) “Colonnaded Streets within the Roman Cityscape: a “Spatial” Perspective”, Journal of Architecture and Urbanism, 38.4, pp. 293-305. https://doi.org/10.3846/20297955.2014.992168

Reynolds, J. M. (1976-1977) “Inscriptions in the market theatre and its immediate neighbourhood”, Libya Antiqua, 13-14, pp. 373-375.

Riadh Hamrouni, M. y Naddari, L. (2018) “Un poids-étalon de Mactaris au nom de Q. Ivnivs Rvsticvs, praefectvs Vrbi”, Antiquités africaines, 54, pp. 85-94. https://doi.org/10.4000/antafr.708

Richard, J. (2014) “Macellum / μάκελλον: ‘Roman’ food markets in Asia Minor and the Levant”, Journal of Roman Archaeology, 27, pp. 255-274.

Richard, J. y Waelkens, M. (2012) “Le macellum de Sagalassos: un marché “romain” dans les montagnes du Taurus? Compte-rendu préliminaire des fouilles archéologiques menées depuis 2005”, en Chankowski, V. y Karvonis, P. (eds.) Tout vendre, tout acheter. Structures et équipements des marches antiques, Scripta Antiqua. Pessac: Ausonius éditions, pp. 83-104.

Ritter, S. y Ben Tahar, S. (2020) “New insights into the urban history of Meninx (Jerba). Preliminary report on the Tunisian-German investigations in 2017 and 2018”, Antiquités africaines, 50, pp. 101-128. https://doi.org/10.4000/antafr.1452

Ritter, S., Ben Tahar, S., Fassbinder, J. W. E. y Lambers, L. (2018) “Landscape archaeology and urbanism at Meninx: results of geophysical prospection on Jerba (2015)”, Journal of Roman Archaeology, 31, pp. 357-372.

Rogers, A. (2011) Late Roman towns in Britain: Rethinking Change and Decline. Cambridge: Cambridge University Press.

Sear, F. (2006) Roman theatres. An Architectural Study. Oxford: Oxford University Press.

Seigne, J. (1992) “Jérash romaine et byzantine: développement urbain d’une ville provinciale orientale”, en Hadidi, A. (ed.) Studies in the history and archaeology of Jordan, IV. Amman: Jordan Press Foundation, pp. 331-341.

Seigne, J. (2008) “Fontaines et adduction d’eau à Gerasa (Jerash, Jordanie)”. Syria. Archéologie, art et histoire, 5, pp. 33-50.

Stucchi, S. (1975) Architettura Cirenaica, Roma: L’Erma di Bretschneider.

Torrecilla Aznar, A. (2007) “Aproximación al estudio de los macella romanos en Hispania”, Caesaraugusta, 78, pp. 455-480.

Underwood, D. (2019) (Re)using ruins. Public building in the cities of the late antique West, A.D. 300-600. Leiden - Boston: Brill.

Uscatescu, A. (2020) “Late antique ceramic imports in Gerasa: new light on the macellum finds (with special reference to the neighbouring region)”, en Lichtenberger, A. y Raja, R. (eds.) Hellenistic and Roman Gerasa. The Archaeology and History of a Decapolis City. Thournout: Brepols Publishers, pp. 173-299.

Uscatescu, A., Martín-Bueno, M. (1997) “The macellum of Gerasa (Jerash, Jordan): from a market place to an industrial area”, Bulletin of the American Schools of Oriental Research, 307, pp. 67-88.

Vitelli Casella, M. (2018) “Appunti sulla romanizzazione delle diverse aree della Dalmazia attraverso la documentazione epigrafica: il caso delle donne”, Sylloge epigraphica Barcinonensis, 16, pp. 139-159.

Ward Perkins, J. B. y Gibson, S. (1976-1977) “The market-theatre at Cyrene”, Libya Antiqua, 13-14, pp. 331-375.

Zimmer, G. (1992) “Statuenaufstellung auf Forumsanlagen des 2. Jahrhunderts n. Chr.”, en Schalles, H.-J., von Hesberg, H. y Zänker, P. (eds.) Die römische Stadt im 2. Jahrhundert n. Chr. Der Funktionswandel des öffentlichen Raumes. Xantener Berichte 2. Köln-Bonn: Rheinland-Verlag, pp. 301-313.