Núm. 47 (2020) ■ 113-142

ISSN: 0210-7716 ■ ISSN-e 2253-8291

https://dx.doi.org/10.12795/hid.2020.i47.05

Recibido: 21-11-2019; Aceptado: 26-2-2020; Versión definitiva: 22-3-2020.


LA VITICULTURA EN ARANDA DE DUERO: EL COMIENZO DE UNA CRISIS, 1580-1612. A PROPÓSITO DE UNA MEMORIA DE JOSÉ DE MEDINA MERCADO[1]

VITICULTURE IN ARANDA DE DUERO: THE START OF A CRISIS, 1580-1612. THOUGHTS ON A MEMOIR BY JOSÉ DE MEDINA MERCADO

José Antonio Cuesta Nieto

Universidad de Burgos

jacnieto@ubu.es | https://orcid.org/0000-0001-9304-2725

Resumen: José de Medina Mercado, regidor de Aranda de Duero y poseedor de un vínculo y patronato, fue un importante cosechero, perteneciente a la élite política, social y económica de esta importante villa. Le atribuimos la autoría de una Memoria que contiene una serie casi continua de apuntes sobre el clima, las cosechas y los distintos precios a los que se vendía el vino. Esta información nos servirá para plantear de forma más precisa la evolución de la viticultura en la Ribera del Duero en un periodo en que se está produciendo el cambio de tendencia hacia la crisis del siglo XVII.

Palabras clave: Aranda de Duero; Ribera del Duero; viticultura; clima; vino; precios.

Abstract: José de Medina Mercado, a councilmen in Aranda de Duero and bearer of the title of jus patronatus, was an important viticulturist and member of the political, social, and economic elite in this important town. He is considered the author of a Memoir that contains an almost continuous series of notes about the weather, harvests, and the different prices at which wine was sold – information that can help us to more precisely discuss viticulture’s evolution in the Ribera del Duero region during a time when trends were moving towards the crisis of the seventeenth century.

Keywords: Aranda de Duero; Ribera del Duero; viticulture; weather; wine; prices.

1. Introducción. La Memoria y su autor

La Ribera del Duero no sólo es una de las comarcas vitícolas más relevantes actualmente, sino que también tiene una larga tradición en el cultivo de la vid y la producción de vinos[2]. La salida de la crisis del siglo XIV supuso una expansión de las roturaciones, convirtiéndose el viñedo en el cultivo predominante para atender la demanda de vino de los núcleos urbanos situados más al Norte que vivían su propia expansión económica y demográfica[3], principalmente Burgos. En su entorno el viñedo se redujo muy ostensiblemente a lo largo del siglo XV[4], creando para su abasto una región vitícola dispersa que tenía uno de sus principales centros en la Ribera del Duero (Aranda, Gumiel del Mercado y Roa)[5].

Nuestro conocimiento de la viticultura en esta comarca hasta mediados del siglo XVII es limitado como consecuencia de la falta de fuentes, pues los diezmos solían arrendarse. La serie más antigua es la de Fuentelcésped, entonces diócesis de Segovia, que arranca en 1620 y tiene algunas lagunas[6]. En los arciprestazgos burgaleses de la diócesis de Osma no las hay antes de finales del siglo XVII[7] y en las tierras de Curiel y Peñafiel las series decimales comienzan en 1675 no contándose con otros datos anteriores a 1634[8]. Para añadir algo más de luz sobre este sector en el tránsito del siglo XVI al XVII nos vamos a servir de la memoria de un cosechero de Aranda. Entre los fondos del archivo de los condes de Bornos se conserva un librito titulado Memoria de las cosas que an acaezido en esta villa de Aranda desde el año de ochenta años a esta parte[9]. Está compuesto por 33 hojas de 150 por 213 milímetros; la hoja 2 es una portada interior y de la 3 a la 10 vuelto se extiende la memoria que comentamos; las restantes hojas, que no consideramos aquí, contienen anotaciones de finales del siglo XVII sobre las rentas del mayorazgo de Mercado.

Bernardino de Mercado, clérigo e hijo de Diego de Medina y Constanza de Quemada, quedó como jefe de la familia a la muerte de su padre (1567); fundó unas obras pías y un patronato de ellas entre cuyos bienes figuraban algunos viñedos[10]. Su hermano Josepe de Medina Mercado, regidor de la villa y primer llamado por su hermano al patronato de estas obras pías, se casó en 1572 con Dña. María Fernández de Quemada y otorgó testamento en 1616 dejando un único heredero, D. Diego de Mercado, que le sucedió en el patronato fundado por su tío[11]; su único hijo, Bernardino de Mercado, murió joven extinguiéndose con él la sucesión directa de esta familia[12]. Por fechas y circunstancias José de Medina Mercado es el probable autor de este libro.

Los sucesivos matrimonios con mujeres de la familia Quemada insertaron a esta estirpe dentro del selecto grupo de cosecheros de Aranda[13]. Por esta razón al autor de esta Memoria le interesaba fundamentalmente la vendimia de cada año y la evolución del mercado local del vino, aunque no le eran ajenas otras preocupaciones relacionadas con Aranda y con el mundo agrario, como la climatología, las crisis demográficas y la cosecha de cereales. De 1581 a 1612 recoge año por año una valoración de la cosecha de vino, del estado de la demanda y de sus precios de venta en la villa. Esta singular fuente nos permite observar este importante sector de la economía de Aranda a lo largo de 32 años en el tránsito del siglo XVI al XVII, sector que ha ido llamando la atención de los investigadores[14].

También incluye diversas referencias sobre aspectos de la vida local[15] y del reino[16]. Así mismo refiere hechos sociales, como el traslado a la villa del monasterio de monjas cistercienses de Fuencaliente (1584)[17]. En el otro extremo del mundo social se encuentra la llegada de unos moriscos de Granada, a los que se aposentó en el hospital de Carrequemada (1584), y la quema de un pastorcillo con dos borricas por pecado nefando (1587). Da noticias sobre fiestas[18] y del desarrolló en estos años de un cierto plan de embellecimiento urbano[19].

2. La población: indicador del desarrollo de la viticultura

Dado que la viticultura era el sector económico predominante en Aranda y que la vid es un cultivo muy exigente en mano de obra, hay una correlación entre el volumen de sus cosechas y la evolución de la población de esta villa. Así, una primera aproximación al desarrollo de la viticultura es el estudio de la demografía, para la que el autor de esta memoria ofrece algunos apuntes que nos ayudan a precisar cosas no especificadas en otras fuentes.

Tanto los censos de población como la serie de bautizados de la iglesia de Santa María[20] nos muestran una misma evolución demográfica (cuadro 1)[21].

Cuadro 1. Censos de población y series de bautizados*

Año

Vecinos

Habitantes

(4 habs./vecino)

Índices

Bautizados de Sta. Mª (media de 5 años)

Índices

1560

1.278

5.112

100

136,4

100

1579

1.109

4.436

86,77

145,4

106,59

1587

1.125

4.500

88,03

150,6

110,41

1595

1.021

4.084

79,89

125,0

91,64

1646

694

2.776

54,30

84,2

61,73

* Fuentes: Moral García 1991, pp. 166, cuadro 4, y ADBu, Aranda de Duero, Libros de bautizados de la iglesia de Santa María.

F. J. González Prieto ha estimado que la ciudad de Burgos alcanzó su plenitud demográfica después de 1540 alcanzándose un máximo en los primeros años de la década de 1550 y un nuevo repunte a comienzos de la década de 1560, si bien entre 1550 y 1565 se percibe una tónica de estancamiento y la peste de 1565 marca el inicio del declive demográfico de la ciudad[22]. Entonces comenzaría un cambio de tendencia que se iría acelerando en las décadas siguientes y que está marcado por una serie de sequías, malas cosechas y graves crisis demográficas.

En Aranda el máximo de población se alcanzó después de 1560, iniciándose un declive a partir de 1575, que, aunque pareció superarse entre 1585 y 1590, sólo lo fue para iniciar un fase regresiva que no tocaría fondo hasta la década de 1630, en que había perdido casi la mitad de su población (gráfico 1). Este cambio de tendencia, como en otras localidades, estuvo marcado por sucesivas crisis demográficas. Así, en 1580 se produjo una epidemia de catarro que comenzó el día 1 de septiembre y que produjo una gran mortalidad. Fue general en toda España y en Burgos produjo una caída de los nacimientos del 20 %[23]. En Ávila comenzó un catarro general muy contagioso también en el mes de septiembre, que vino precedido por malas cosechas y que se extendió a otros muchos sitios de esta provincia, como Gemuño donde comenzó en agosto y le llamaron la cucurucha[24]. También se expandió por algunas zonas de la Submeseta Sur, como Guadalajara[25], aunque A. L. Velasco Sánchez, al estudiar la población de la provincia en este periodo, se ha tenido que limitar a señalar que en 1580 se extendieron enfermedades de alta letalidad en algunos pueblos, sin poder indicar la enfermedad de que se trataba[26].

Gráfico 1. Bautizados en la iglesia de Santa María. Fuente: ADBu, Aranda de Duero, Libros de bautizados de la iglesia de Santa María.

Un segundo periodo de sobremortalidad, en este caso diagnosticado como de peste, se extendió desde el día de Nuestra Señora de agosto de 1591 hasta mediados de enero del año de 1592 en el que murió mucha gente de secas; abía días de beynte y más personas; pareció por las yglesias aber muerto más de dos mill personas grandes y chicas (f. 5r). En el verano de 1592 hubo en Burgos una epidemia de tifus exantemático que pudo producir unas 2.000 víctimas[27]. En Ávila, como en Aranda y Burgos, vino precedido por malas cosechas[28].

Menos grave para la villa fue la peste de 1598-1599, aunque tendría un efecto acumulativo sobre una demografía que ya se mostraba depresiva. Fue la peste desde prencipio de agosto de este año (1598) asta agosto de nobenta y nuebe; digo ser verdad, que abían muerto trecientas personas de esta enfermedad. Esta peste cuenta con abundante bibliografía[29]. En Burgos tuvo un desarrollo algo más tardío, aunque la mortalidad fue mucho mayor; las primeras muertes se produjeron en 7 de diciembre de 1598, la mortalidad se intensificó en la primavera del año siguiente, alcanzó su punto álgido en verano y desapareció en octubre[30].

Las crisis demográficas se reprodujeron a lo largo del siglo XVII; así, en 1605-1606, 1615-1616[31], 1631, 1658-1659, 1668-1669, 1678-1680 y 1699[32]. Entre los censos de 1595 y 1646 se habría producido en Aranda una caída de la población del 32 % y entre el de 1560 y 1646 de un 45,69 %, en consonancia con lo acontecido en general en Castilla la Vieja y León donde la reducción oscila entre el 30 y el 50 %, aunque menor que en Burgos donde el vecindario había caído unos dos tercios[33].

3. La producción vitícola y los precios del vino

Dado que la viticultura era la actividad económica más importante de Aranda[34], la información más relevante que ofrece es la correspondiente a la comercialización del vino. A este respecto, hace una valoración de la cosecha, que peca un tanto de subjetiva, y nos ofrece el precio en que se tasó el mosto y la puja o sucesivas pujas a que se puso el vino a lo largo de todo el año siguiente en que se procedía a su comercialización.

Ya en el siglo XVI Aranda de Duero era el principal centro de producción vitícola de la Ribera del Duero burgalesa. Excluidas sus aldeas de Fuentespina, Villalba y Quemada, en el periodo 1557-1560 se obtuvo una cosecha media anual de 304.110 cántaras, en el de 1578-1585 se comercializó una media anual de 342.921,25 cántaras y de 316.303 en el de 1589-1594, alcanzando en años buenos como 1584 las 538.850 cántaras y cayendo en años malos, como 1578, a 187.300 cántaras (tabla 2)[35]. Entrado el siglo XVII debió producirse una caída de esta producción[36].

Cuadro 2. Producción de vino en Aranda de Duero, 1557-1560 (cántaras)*

Año

Noveno del diezmo

Cosecha

estimada

Santa María

San Juan

Total

1557

3.381

1.540

4.921

442.890

1558

2.614

1.021

3.635

327.150

1559

2.262

1.972

4.234

381.060

1560

546

180

726

65.340

* Fuente: Iglesia Berzosa 2003, p. 96.

A. Huetz de Lemps nos explicó el procedimiento de comercialización del vino en cada municipio. La primera operación era la cala o aforo del vino, operación realizada a principios de enero por uno o dos aforadores, muchas veces forasteros, para registrar el total de vino existente en las bodegas; el aforo a veces se repetía a lo largo del año para conocer el ritmo de su comercialización. Esta comercialización se hacía a partir de entonces –rara vez se adelantaba al mes de diciembre y sólo por haber sido muy corta la cosecha del año anterior– comenzando en fecha que determinaba cada concejo. Aunque en principio hubo libertad de precios, pronto, para evitar el que fueran excesivos, se impuso el que el ayuntamiento, o algunas personas destinadas al efecto, tasasen el vino bien en función de su calidad o bien en función del precio que imperase en los centros productores vecinos. Este precio en pocas ocasiones se mantenía todo el año, sino que en muchas localidades se establecían dos o más precios para distintos y sucesivos periodos. Todas estas medidas se completaban con la prohibición de comercializar los vinos forasteros hasta que se comercializasen los producidos en la localidad[37].

Nuestro autor nos ofrece datos de sumo interés sobre la producción de vino de Aranda. Así, hace una valoración de la cosecha de cada año, del precio a que se tasó y de las sucesivas pujas –subidas de precio– que se fueron haciendo a lo largo del año. Cada apunte proporciona datos de dos años seguidos, pues al primero pertenece la cosecha y al segundo las sucesivas pujas, pues a partir de enero se comercializaba (tabla 3).

Lamentablemente no hemos podido obtener otros datos para contrastarlos, pues las parroquias arrendaban los diezmos anotándose sólo su importe en dinero, caso de la propia Aranda y de Zazuar. Sólo disponemos de las breves series de datos proporcionadas por los Expedientes de Hacienda de Simancas; la primera serie (1557-1560) corresponde a los diezmos percibidos por las fábricas de las dos iglesias de Aranda (1/9 del diezmo), mientras las otras dos series (1579-1586 y 1590-1595) ofrecen datos de comercialización con los precios correspondientes (cuadros 2 y 3), no de la cosecha, aunque evidentemente hay una relación directa entre el vino vendido y la producción de mosto de la vendimia del otoño anterior, pues un alto porcentaje de la cosecha se comercializaba.

Cuadro 3. Producción y comercialización del vino en Aranda de Duero*

Año

Calificación de la cosecha

Tasación del mosto (mrs.)

Valor en las pilas (mrs.)

Posturas del vino (mrs.)

Exp. Hacienda

ventas (cántaras)

precios (mrs.)

1578-1579

187.300

1579-1580

259.690

1580-1581

mucho bino

22

8

40, 102 (1-IX)

422.380

23-68

1581-1582

onesto bino

60

68

85, 102 (20-VII)

302.530

40-84

1582-1583

muy mayor que el 80

18

6

34, 56 (12-VIII)

470.490

32-50

1583-1584

282.920

40-68

1584-1585

buena

42,5

64, 102 (22-IX), 136 (2-X)

538.850

68-118

1585-1586

moderada

74

102

279.210

136-152

1586-1587

ruyn

119

136, 170 (31-V), 238 (7-IX), 272 (16-X)

1587-1588

poco bino

119

144,5, 170 (31-VIII)

1588-1589

ruyn

88

136 (VII), 221 (30-IX)

1589-1590

68

102

286.170

87

1590-1591

mucho bino

43

64, 85 (10-VIII)

339.620

64

1591-1592

buena de bino

46

64, 93,5 (10-VI), 68 (11-XI)

382.480

56

1592-1593

buena

35

56

398.790

44-48

1593-1594

razonable

62

95, 119 (20-V)

261.850

62

1594-1595

grande

81

93,5, 110,5 (22-IV), 145,5 (17-IX)

228.910

102

1595-1596

mucho bino

42

1596-1597

no maduró bien la vba

34

24

64, 136 (10-X)

1597-1598

raçonable fruto

72

102

1598-1599

pequeña

189

340

1599-1600

buena

74

93,5, 136 (12-IX)

1600-1601

chica

102

136, 170 (8-II), 153 (15-VII), 204 (20-IX)

1601-1602

pequeña

170

204, 153 (24-III), 119 (10-IX)

1602-1603

pequeña

144,5

187, 219 (15-II), 255 (20-III), 289 (8-VI), 238 (1-XI)

1603-1604

1604-1605

buena

77

102, 127,5 (16-XI), 153 (10-XII)

1605-1606

pequeña

146

170, 204 (4-IV), 170 (10-VIII)

1606-1607

buena

74

83,5, 119 (6-IV), 187 (8-IX), 238 (20-IX), 170 (6-XI)

1607-1608

mala

127,5

153

1608-1609

moderada

90

127,5

1609-1610

raçonable

90

110,5, 127,5 (17-V), 170 (12-VII), 127,5 (31-VII)

1610-1611

buena

74

102, 119 (1-V), 136 (4-VII), 156 (3-VIII)

1611-1612

1612-1613

raçonable

110

153 (18-I), 176 (6-III)

*Fuentes: Apéndice e Iglesia Berzosa 2003, pp. 97, 99 y 101.

La calificación de las cosechas por Josepe de Mercado ofrece cuatro posibilidades, a saber, mala (chica, mala, pequeña, ruyn o poco bino), regular (moderada, razonable), buena (buena, onesto bino) y muy buena (mucho bino), terminología que a veces puede ser confusa, pues la cosecha de 1592, calificada simplemente como buena, puede considerarse muy buena. Los Expedientes de Hacienda de Simancas nos ofrecen las cántaras de vino que se vendieron y por las que se pagó alcabala, no las cosechas totales, que comprenden también el vino cosechado por clérigos, que estaba exento del impuesto, y el consumido por los propios cosecheros. Precisado esto, en los años de malas cosechas las ventas no alcanzaban las 200.000 cántaras, en los de cosechas regulares estaban entre 200.000 y 300.000 cántaras, en los de buenas cosechas pasaban de las 300.000 cántaras y en los de cosechas muy buenas superaban las 400.000 o, incluso, las 500.000 cántaras.

En los 29 años para los que ofrece esta evaluación se produjeron 10 cosechas malas (1586-1588, 1596, 1598, 1600-1602, 1605 y 1607), 6 regulares (1585, 1593, 1597, 1608-1609 y 1612), 8 buenas (1581, 1584, 1591-1592, 1599, 1604, 1606 y 1610) y 5 muy buenas (1580, 1582, 1590 y 1594-1595); hay una cosecha sin calificar (1589), aunque, por las cántaras obtenidas, fue regular. Contrastando los datos ofrecidos por nuestra memoria con las ventas de vino de los Expedientes de Hacienda de Simancas se aprecian diferencias (cuadro 4); así, la cosecha de 1584 parece muy buena en vez de buena, la de 1590 buena en vez de muy buena y la de 1594, calificada de grande, no pasa de regular. Hemos de destacar que se produjeron dos ciclos de malas cosechas de uva, uno de cuatro años seguidos (1585-1588) y otro con alternancias de 1596 a 1607. Como parece lógico, los ciclos de malas cosechas describen periodos de alza de precios del vino.

Cuadro 4. Calificación de las cosechas y venta de vino en Aranda de Duero

Año

Calificación

de la cosecha

Posturas

del vino (mrs.)

Ventas (cántaras)

1580-81

muy buena

40, 102

422.380

1582-83

muy buena

34, 56

470.490

1584-85

muy buena*

64, 102, 136

538.850

1590-91

buena*

64, 85

339.620

1581-82

buena

85, 102

302.530

1591-92

buena

64, 93,5, 68

382.480

1592-93

buena

56

398.790

1583-84

regular*

282.920

1579-80

regular*

259.690

1585-86

regular

102

279.210

1589-90

regular

102

286.170

1593-94

regular

95, 119

261.850

1594-95

regular*

93,5, 110,5, 145,5

228.910

1578-79

mala*

187.300

* La calificación de la cosecha es nuestra. Fuentes: Apéndice e Iglesia Berzosa 2003, pp. 99 y 101.

Vayamos ahora al análisis de los precios del vino. Para contrastar la validez de las posturas del vino de esta Memoria las presentamos conjuntamente con las contenidas en los Expedientes de Hacienda de Simancas, que sólo corresponden a dos series de seis años (gráfico 2). Podemos observar como la evolución de ambas series es paralela; no obstante, José de Medina Mercado ofrece variaciones anuales de precios con subidas claramente más altas, caso de 1585 (136-272 mrs. frente a 132 mrs.), 1591 (de 64 a 127,5 mrs. frente a sólo 56 mrs.), 1593 (85-119 mrs. frente a 84 mrs.) o 1594 (93,5-127,5 mrs. frente a sólo 102 mrs.).

Gráfico 2. La comparación de las posturas medias del vino (mrs./cántara). Fuente: Apéndice e Iglesia Berzosa, pp. 97 y 101.

Los precios siguen una tendencia alcista hasta 1604 dando entonces muestras de un cambio de tendencia (gráfico 3). En el medio plazo, describen dos ciclos con sus correspondientes fases de expansión y regresión, uno de 1580 a 1592 y otro de este año a 1610. En el primer ciclo se alcanza un precio medio de 101,5 mrs. por cántara y en el segundo de 150,9 mrs. por cántara, lo que representa un incremento de 48,67 % de los precios entre un ciclo y otro.

Gráfico 3. Posturas del vino: intervalos y precios medios (mrs./cántara). Fuente: Apéndice.

El análisis de precios resulta más complejo. Para tratar de sistematizarlo hemos elaborado el cuadro 5 en el que diferenciamos los dos ciclos que describe la serie de precios. Como es obvio, cuánto mejor es la cosecha –y mayor la oferta– el precio del vino es menor. En ambos periodos el precio mínimo del vino, que es el de las primeras pujas, tiene un comportamiento similar, aunque con algunas diferencias; en las cosechas buenas se incrementa 35 y 39 puntos respectivamente con respecto a las muy buenas, en las regulares lo hace 72 y 58 y en las malas 120 y 116. En cambio, los precios máximos presentan más diferencias, pues en 1580-1592 las diferencias no son sustanciales en las cosechas muy buenas, buenas y regulares multiplicándose por 2,5 en las malas, mientras en 1593-1610 las variaciones son mucho menores y oscilan entre 20 y 30 puntos.

Ahora bien, si comparamos los precios mínimos y los máximos de cada tipo de cosecha las diferencias son menores en todos ellos en 1580-1592, si exceptuamos los años de cosechas muy buenas (109,8 %) –incrementos del 15,25, 0 y 59,2 % respectivamente en años de cosechas buenas, regulares y malas– que en 1593-1610 –incrementos 85, 23,3 y 30,9 %–; en estos tres tipos de cosechas se pasa de un incremento medio del 26,5 en el primer periodo a un del 40,9 % en el segundo.

Cuadro 5. Precios medios anuales del vino (mrs./cántara) e índices (100=buena)*

Valoración

de la cosecha

1580-1592

1593-1610

Años

Mínimo

Máximo

Años

Mínimo

Máximo

mrs.

índices

mrs.

índices

mrs.

índices

mrs.

índices

muy buena

3

46,7

60,9

98

110,8

1

60

64,8

buena

4

76,7

100

88,4

100

4

92,25

100

170,75

100

regular

2

102

133

102

115,4

6

113,5

123

140

82

mala

3

138,8

181

221

250

7

167

181

218,6

128

* En 1595, en que la cosecha fue muy buena, se tasó el mosto en 42 mrs., estimamos un incremento en el precio del vino del 40 % (60 mrs.), tomando como referencia los incrementos de 1590 y 1591. Fuente: Apéndice.

Apenas conocemos posturas del vino que nos sirvan de referencia en otras localidades de la Ribera del Duero[38] ni prácticamente de comarcas inmediatas, salvo una bastante incompleta de la villa de Lerma (gráfico 4), sita en la Ribera del Arlanza[39].

Gráfico 4. Posturas del vino en Lerma (mrs./cántara) Fuente: Hernández 1986, p. 277.

En la comarca del Arlanza también hemos logrado la serie de precios del vino vendido por la fábrica parroquial de Pampliega, eso sí, con lagunas prolongadas en las primeras décadas del siglo XVII en que se anotan importes totales sin detallarse cántaras y precios[40]. En el gráfico 5 presentamos los precios de la fábrica de Pampliega y las posturas medias del vino de Lerma, que cubren algunos de estos huecos, apreciándose bastante concordancia entre unos y otros datos.

Gráfico 5. Precios del vino en la comarca del Arlanza. Fuentes: ADBu, Pampliega, Libros de Fábrica, y Hernández 1986, p. 277.

En el gráfico 6 tomamos todos los precios de la comarca del Arlanza, de una y otra procedencia, integrados en una sola serie y los presentamos conjuntamente con las posturas medias del vino de Aranda de Duero. Observamos que hay un gran paralelismo entre una y otra serie, de donde se deduce que formaban parte de una misma región vitivinícola sometida a unas mismas condiciones climáticas y regidas por la demanda de los mismos mercados. Hay que añadir que en Lerma los precios que se sostienen en una media elevada entre 1613 y 1623 (143 mrs.) lo hacen bajo el influjo de la corte mantenida por el duque de Lerma hasta su pérdida del poder. Solamente, en Aranda observamos unas oscilaciones de precios algo menores, debido probablemente a una producción bastante más elevada.

Gráfico 6. Los precios del vino en Aranda de Duero y la comarca del Arlanza. Fuentes: Apéndice, ADBu, Pampliega, Libros de Fábrica, y Hernández 1986, p. 277.

Por otra parte, la serie de la comarca del Arlanza confirma el cambio de tendencia en la evolución de los precios producido hacia 1604 que supone la detención de la fase alcista para adentrarse en una fase de estancamiento de los precios del vino en vellón, que sería de descenso expresándolos en plata.

Al decir de Sebastián Moreno, los núcleos productores tenían poca capacidad para establecer los precios del vino, siendo las élites de gobierno de las ciudades –las de Burgos en el siglo XV– las que determinaban los precios[41]. Es posible que en buena parte del siglo XVI, siguiera siendo así, aunque no cabe duda que hay que contar con más actores y con los propios cosecheros y los regimientos de las villas, que también hubieron de tener un papel activo en esta materia.

4. La cosecha de cereales: una producción secundaria

Las cosechas de trigo no se reseñan más que cuando presentan alguna alteración relevante, especialmente, crisis agrarias (cuadro 4). Así, considera buenas todas las cosechas hasta 1590, destacando la de 1585 como muy buena. Después siguen seis años en los que se encadenan cinco crisis agrarias y en los que los precios del trigo y del pan vendrían a duplicarse con respecto a los años normales y a triplicarse con respecto a los buenos.

Cuadro 6. La cosecha de trigo en Aranda de Duero: calificación y precios*

Año agrícola

Calificación

de la cosecha

Precio del trigo

(rs./fanega)

Precio del cuartal de pan (mrs.)

Comentarios

1584-1585

“mucho trigo”

7-8

8-9

1590-1591

“poco trigo”

20-25

24-25

“Yban por el trigo a la raya de Portugal”

1591-1592

“poco trigo”

22-24

26

1592-1593

“se cogió poco”

24

1593-1594

“muy poco trigo”

25

24

“se fue por elo a Miranda de Ebro”

1595-1596

“se cogió poco trigo”

1608-1609

5,5-6

“balió el trigo muy barato”

1609-1610

3-4

* Fuente: Apéndice.

En esta serie de años destacan dos en los que hubo de traerse trigo de fuera para garantizar el abasto de la población y mantener los precios medianamente controlados. En 1590 la cosecha fue mala, por lo que en 1591 se daba el pan en las casas de regimiento y, volviendo a haber mala cosecha, hubo de importarse trigo desde la frontera de Portugal. Tras la mala cosecha de 1594 el regimiento, que repartía el trigo en una casa de cada una de las cuatro cuadrillas de la villa, envió al propio José de Mercado a comprar vn poco de trigo a Miranda de Ebro, donde lo adquirió a 25 rs. por fanega, precio que, con los 7 rs. de transporte, subió a 32 rs.; mezclado con algo grano que había en el granero del concejo pudo venderse por un precio algo menor.

La tasa de la fanega de trigo estaba desde 1582 en 14 rs. En octubre de 1605 se elevó a 18 rs. En los años de crisis agraria anteriores a éste no se respetó tasa alguna.

En fin, es digno de resaltar que, pese a la especialización en la viticultura, Aranda no pareció especialmente desabastecida de pan, pues su agricultura cubrió en la mayor parte de los años las necesidades de la villa.

5. La climatología como factor limitador de la agricultura

Nuestro autor ofrece algunas notas de interés que permiten hacer algún apunte sobre la historia del clima. La bibliografía insiste en que a finales del siglo XVI se produjo un enfriamiento del clima en el marco de lo que expresivamente se conoce como la Pequeña Edad de Hielo. Precisamente las cosechas de uva, combinadas con otros datos, evidencian que las décadas más frías del siglo XVI fueron las de 1570 a 1600[42]. En el Sur-Oeste de Alemania habría comenzado en 1560-1567 en que se concentran cinco inviernos rigurosos a los que siguen cinco primaveras frías[43]. En la Península Ibérica puede retrasarse algo.

En los 34 años que comprende esta memoria se señalan once episodios climáticos adversos con una desigual incidencia sobre la agricultura:

Los episodios climáticos adversos se concentran entre 1587 y 1608, en que se suaviza el clima, siendo precisamente los trece años que se extienden de 1596 a 1608 en los que se hicieron las diez cosechas de uva calificadas como malas o de forma equivalente.

Según M. Barriendos, entre 1575 y 1610 se produjo en la Península Ibérica un periodo climatológico caracterizado por un incremento significativo de los hidrometeoros acusados (inundaciones, tempestades marítimas, grandes nevadas) y por la disminución clara de las sequías. Lo analiza con documentación de Cataluña, donde detalla años especialmente fríos desde 1570. Después, entre 1630 y 1640, se habría producido un aumento notable de las sequías[47].

6. Conclusiones. Una interpretación de la evolución de la viticultura

A. García Sanz, conjugando la información demográfica y de producción de vino de los Expedientes de Hacienda de Simancas y del Catastro de Ensenada, llega a la clara conclusión de que las localidades más productoras en el siglo XVI (Aranda, Gumiel de Izán, Fuentespina, Vadocondes) se estancan o cae algo su producción entre ambos periodos, mientras las menos productoras multiplican sus cosechas, del mismo modo que las localidades más populosas perdieron un 40 % de sus habitantes, y los pueblos pequeños crecieron casi un 80 %[48]; caso paradigmático de este último grupo habría sido Funtelcésped cuya cosecha de mosto se multiplicó por seis como consecuencia de una extraordinaria expansión de los viñedos producida de 1620 a 1720[49]. A la luz de nuestros datos y admitiendo en lo fundamental esta tesis, tratemos de concretar más esta evolución.

La demografía, comparada con los pocos datos sobre la producción vitícola, se muestra como un buen indicador de la evolución de la coyuntura. Como indicábamos a partir de la serie de bautismos de la iglesia de Santa María, la fase recesiva de la población habría comenzado en un momento temprano, entre 1575 y 1580, prolongándose hasta 1630. Pues bien, esta misma evolución aparece en los Expedientes de Hacienda de Simancas, que nos ofrecen un máximo de 342.921,25 cántaras de vino comercializadas de media en 1578-1585, para reducirse en el periodo 1589-1594 a una media anual de 316.303 cántaras, lo que marcaría una caída del 7,76 % en sólo una década. La relación entre ambos aspectos aparece expresada en el gráfico 7, en el que la natalidad parece preceder a la producción de vino en sus variaciones, marcando un estancamiento o suave descenso hasta 1589 y después una fase de declive.

Gráfico 7. Bautizados y cosecha/venta del vino. Fuente: ADBu, Aranda de Duero, bautizados de la iglesia de Santa María.

La memoria que manejamos nos muestra estos mismos cambios coyunturales. Nos ha permitido describir dos ciclos (1580-1592 y 1593-1610) y apreciar como la valoración de las cosechas empeora del primero (7 vendimias muy buenas y buenas y 5 regulares y malas) al segundo (5 vendimias muy buenas y buenas frente a 13 regulares y malas). Los precios del vino en estos años también nos dan alguna luz. Hay diferencias que son esperadas, como las producidas en función de la calidad de las cosechas. Lo más significativo en el comportamiento de los precios son las variaciones anuales que presentan un incremento medio del 26,5 % en el primer periodo y de un 40,9 % en el segundo, lo que entendemos que es consecuencia de una mayor tensión en los mercados.

El endurecimiento del clima después de 1580 acentuaría esta evolución, pero no es la causa fundamental, pues, como se ha señalado, hay una serie de poblaciones que desarrollarán la viticultura a partir de 1620, con el caso de Fuentelcésped como ejemplo. También pudimos comprobar cómo hacia 1570 el viñedo perdía importancia dentro del conjunto del patrimonio de las élites arandinas ganando peso los censos al quitar y juros[50], prueba de que estaba perdiendo parte de su papel central en la economía de la villa.

Si relacionamos la evolución de los bautizados con la de las posturas medias del vino (gráfico 8), apreciamos como los precios sostuvieron una tendencia alcista hasta 1604, pero el cambio de tendencia en los precios, empujado por la caída de la demanda y confirmado con los de la ribera del Arlanza, se refleja en la caída de los bautismos a partir de esa fecha.

Gráfico 8. Bautizados y posturas del vino. Fuente: ADBu, Aranda de Duero, bautizados de la iglesia de Santa María, y Apéndice.

En este sentido, las series comparadas de precios del vino de la comarca del Arlanza y de Aranda de Duero parecen mostrar que hasta la crisis de 1599, Aranda ofrecía no sólo una cantidad mucho mayor de vino, sino que también lo hacía a precios algo más moderados; la evolución posterior, que parece aproximarse más, queda por estudiar.

Hay otra razón a reseñar, también con carácter coyuntural. En la década de 1590 se produce una elevación del precio del trigo mucho mayor que la del precio del vino de modo que las relaciones de intercambio resultan negativas para los cosecheros que pasaron de destinar 1,5 o 2 cántaras para comprar una fanega de trigo a llegar a gastar el importe de 7 a 14 cántaras, según años, para el mismo fin (cuadro 8). Aunque la relación parezca recuperarse a favor del vino después de 1600, sólo será en los años buenos, pues la elevación de la tasa de la fanega de trigo en 1604 de 14 rs. (476 mrs.) a 18 rs. (612 mrs.) es indicativa de que pudo ser un tanto coyuntural y de que el reajuste pudo retrasarse precisamente hasta 1620 en que el viñedo empieza a extenderse por otros pueblos de la Ribera donde había tenido una importancia menor.

La compra en 1616 por el concejo de Aranda del oficio de fiel ejecutor de las medidas y de la correduría del vino hemos de interpretarla como una respuesta a la contracción del mercado del vino que estaba sufriendo y a la reducción del margen de beneficios para los cosecheros[51].

Cuadro 8. Relación entre el precio del trigo y el precio medio del vino (mrs.)*

Año

Trigo (fanega)

Vino (cántara)

Trigo/vino

1584-1585

255

102

2,05

1590-1591

765

93,75

7,99

1591-1592

782

56

13,96

1593-1594

850

110,5

7,69

1608-1609

199,5

1405,5

1,39

1609-1610

119

129

0,92

* Fuente: Apéndice.

Hay un problema más a considerar. Entendemos que la estructura de la propiedad del viñedo en Aranda se asentó en el predominio de una serie de grandes cosecheros[52]. En 1578 había en Aranda 446 cosecheros que comercializan una media de 768 cántaras[53]; un cálculo más sencillo y que sirve para establecer comparaciones lo ha realizado Brumont, que señala que en Aranda se cosecharon 315 cántaras por vecino en 1578-85 y 254 en 1589-94[54], mientras que en siete de las merindades de Castilla la Vieja la media oscila entre 39 y 125 cántaras por vecino siendo pocos los pueblos en que se alcanzan las 150 cántaras por vecino[55]. Sus costes de producción debían ser mayores que los del pequeño campesino que se bastaba con la mano de obra familiar. Algunos de estos grandes cosecheros no tardarían mucho tiempo en descepar sus viñedos y reconvertirlos en tierras de cereal. Es el caso de los Mercado, que en 1630 y 1633 convirtieron dos viñas extensas de su mayorazgo en tierras de labor y las dividieron en varias parcelas que entregaron a censo perpetuo a distintos labradores[56]. Por contra, en aquellas poblaciones en las que el viñedo se expandió a partir de 1620 debió producirse, al menos en sus primeras etapas, por iniciativa de los pequeños labradores que desarrollaban el cultivo con mano de obra familiar.

El factor demanda parece ser el fundamental. Burgos, que era un gran centro consumidor de vino, se abastecía fundamentalmente de la Ribera del Duero[57], importando, según F. Brumont, 167.927 cántaras en los años 1579-83, quien también calcula un elevado consumo de 76 cántaras por vecino y año que justifica asignando a la ciudad el papel de centro redistribuidor[58]. En todo caso el potencial de consumo de la ciudad se desplomó entre 1561 y 1610 como consecuencia de la pérdida de entorno al 55 % de su vecindario[59], según mostramos en el cuadro 9[60]. Aranda abastecía a otros poblaciones, como las de la comarca de la Demanda, donde la población también alcanzó su máximo hacia 1560, aunque el descenso fue claramente menor[61].

Cuadro 9. Población de Burgos y consumo estimado de vino*

Año

Población

Consumo

estimado de vino

(Cántaras)

Vecinos

Índices (100=1580)

1561

4.385

134,0

225.170

1580

3.270

100,0

167.927

1591

2.665

81,5

136.848

1597

2.347

71,8

120.518

1610

1.950

59,6

100.132

* Fuente: González Prieto 2005, pp. 93-101, y Brumont 1991, p. 118.

Parece que el reajuste ante la caída de la demanda de los mercados norteños se realizó primero mediante la reducción de la producción y después arrastró la bajada de los precios. En este sentido, la calificación de las cosechas como buenas, regulares o malas no hay que interpretarlo en relación a su volumen total, sino a sus rendimientos, por lo que a finales del siglo XVI las cosechas pueden calificarse como buenas y su volumen total ser menor que una o más décadas antes.

F. Brumont, referido al viñedo de la Rioja, ha destacado precisamente este factor como fundamental. El viñedo no competía con el cereal por las mismas tierras, ya que requieren suelos de distintas características, y bastaba con una demanda sostenida para que el campesinado comenzaran a realizar plantaciones[62].

7. Apéndice documental

Memoria de las cosas que an acaezido en esta villa de Aranda desde el año de ochenta años a esta parte.

AHNob, Bornos, leg. 184/5, ff. 1-10r.

i0dlxxx años.

Memoria de las cosas que an acaezido en esta villa de Aranda desde el año de ochenta años en adelante. //2v//3r

i0dlxxx [1580]

En el año de ochenta se cogio mucho bino que se quedaron muchas biñas por bendimiar. Atasose este mosto a beinte y dos mrs. la cántara y balió en las pillas a ocho mrs. la cántara. Púsose la postura este bino a quarenta mrs. la cántara para se bender en el año de ochenta y vn años. Pugose este bino a uno de septienbre a tres rs. la cántara.

En este año bino el catarro a primero de setienbre; murió mucha gente.

Año de lxxxj [1581]

En el año de ochenta y vn años se cogió onesto bino; balió el mosto en las pilas a dos rs.; atasose este bino a sesenta mrs. la cántara y púsose de postura a dos rs. y medio para el año de ochenta y dos. Pugose este bino en veinte de julio a tres rs. la cántara.

Año de lxxxij [1582]

En el año de ochenta y dos se atasó el mosto por diez y ocho mrs la cántara y balió en las pilas por seis mrs. la cántara porque fue muy mayor que la cogecha del año de ochenta; púsose este bino para el año de lccciij a real la cántara. Pugose este <bino> en el mes de agosto a doze días a cinqüenta y seis mrs.

En este dicho año de lxxxij bino la tasa a catorze reales. //3v

Año de j0dlxxxiij [1583]

En este dicho año día de Sant Illifonso bino vna abenida de Duero que entró por vnas cuebas que están enfrente de la aceña del concejo y pasó a quatro qüebas del barrio de San Llorente; llegó asta la cueba del licinciado Bázquez; dígolo cumo testigo de bista.

Y llebó vn pedazo de muralla.

Año de 0dlxxxiiij [1584]

En este año de ochenta y quatro binieron las monjas y las aposentaron en las casas de Joan de las Muñozas y allí estubieron cosa de vn año y luego se pasaron donde están.

Binieron a treze de abril del dicho año las dichas monjas.

En este dicho año binieron los moriscos de Granada y los aposentaron en el Espital de Carre Quemada. Binieron a beinte y cinco de febrero de dicho año.

En este dicho año bino que se pagase de diez uno. Duró poco porque se encabezó luego la villa.

Cogecha de bino deste año de ochenta y quatro, la [cual] fue buena; atasose el mosto a real y cuarto la cántara y los pobres lo apelaron a Balladolid y lo remitieron a dos onbres que nonbrase el regimiento y lo atasaron a real y quartillo la cántara; púsose de postura este bino para se bender en el año de ochenta y cinco a sesenta y quatro mrs. la cántara; pugose este bino a beinte y dos de septienbre a tres rs. la cántara y en diez de otubre se tornó a pugar a quatro rs. la cántara.

Año de 0lxxxv [1585]

Cogecha de bino del dicho año fue moderada; atasose el mosto a dos rs. y seis mrs. la cántara; púsose de postura para el año de lxxxvj a tres rs.; valió casi todo el año que no se pugó. //4r

En este dicho año de lxxxv se cogió mucho trigo, que valía la anega de trigo por siete y por ocho rs. y el quartal de pan a ocho y nueve mrs.

Hen este año se pasó el rastro a los portalles de Rasiñas.

Año de lxxxvj [1586]

Cogecha de bino del año de lxxxvj fue ruyn; atasose el mosto a tres rs. y medio; púsose este bino a quatro rs. la cántara para se bender en el año de ochenta y siete; tornose a pugar este bino en fin de mayo a cinco rs.; tornose a pugar este bino a catorze de setienbre a siete rs. y se tornó a pugar este bino a diez y seis de otubre a ocho rs.

Año de lxxxvij [1587]

En este año de lxxxvij se cogió poco bino; atasose el mosto a tres rs. y medio; púsose de postura a quatro rs. y quatillo <para el año de lxxxviij>; púgose este bino en fin de agosto a cinco rs. y ansí se acabó.

En este dicho año quemaron a vn pastorcillo domingo de la Trinidad por el pecado enefando que se le probó que tenía que hacer con dos borricas y también las quemaron a ellas.

En este dicho año domingo de la Trinidad amanecieron las biñas eladas.

Año de lxxxviij [1588]

En este año se yzo la coyza de la billa y se corrieron toros día de la † de mayo; fue capitán Christóbal de Garay. //4v

Cogecha de bino del año de lxxxviij fue ruyn; atasose el mosto a ochenta y ocho mrs. la cántara; pugose este bino en el mes de jullio a quatro rs. y tornose a pugar en fin de setienbre a seys rs. y medio y ansí se acabó.

Año de lxxxix [1589]

En este dicho año eló mucho el ynbierno que pasaban maderas por encima de los yellos por Duero de la otra parte acia el toregón y tanbién pagaban la gente duzomas (sic) de vn mrs.

En este dicho año trugeron a Nuestra Señora de las Viñas a la yglesia de Santa María porque avía más de quatro meses que no abía llubido y, mediante Su Magestad, llubió muy bien que los panes que se secaban bolbieron muy bien.

En este dicho año se atasó el mosto a dos rs. y diez y nuebe mrs.; púsose de postura a tres rs. para se bender en el año de nobenta y ansí se acabó.

Año de xc [1590]

En este dicho año se quemaron las casas de Bartolomé Berçosa a San Juan y otra dos pares; fue día de Nuestra Señora de marzo y allaron en las vnas casas mill y quinientos rs. y pareció ser moneda del rey don Pedro.

En este dicho año se cogió mucho bino que se atasó a quarenta y tres mrs. la cántara; púsose de postura el año de nobenta y vn años a sesenta y quatro mrs.: pugose a diez de agosto a dos rs. y medio. //5r

Año de nobenta y vno [1591]

En este dicho año de 91 bino vna abenida de Duero mayor que la pasada que entró en el matadero de la carnecería y en la calle de Sant Ana; derribó tres casas; fue la mayor que se a bisto; fue día de Santa María.

En este dicho año se cogió poco trigo, que bino a baler la fanega de trigo a beinte rs. y se daba el pan en las casas de regimiento; y adelante, desde San Pedro asta que se cogió lo otro, pusieron el pan a beinte y quatro mrs. y bino a baller el trigo a beinte y cinco rs., que lo traýan de más de treinta leguas.

En este dicho año bino a baller el anega de trigo a beinte y cinco rs. en el mes de junio y ju[l]io y el quartal de pan a beinte y quatro mrs.

Yban por el trigo a la raya de Portugal.

En este año fue la Armada de el rey [a] Aragón porque mataron al birey que tenía puesto nuestro rey; degollaron a muchos de él grandes y bínose a poner en paz.

En este dicho año fue buena de bino, que se atasó el mosto a quarenta y seis mrs. la cántara y se puso de postura a sesenta y quatro mrs. la cántara; pugose este bino a diez de junio a tres rs. menos quartillo y en el mes de nobienbre a onze se abajó a dos rs.

En este año bino la peste que desde el día de Nuestra Señora de agosto asta mediados de enero del año de nobenta y dos no degó de morir mucha gente de secas; abía días de beynte y más personas; pareció por las yglesias aber muerto más de dos mill personas grandes y chicas. //5v

Año de nobenta y dos [1592]

En este dicho año se iço vna muy solene procesión y bieneron las cruces del aciprestazgo; fue por las reliq[u]ias que ynbió el ermano de Bernal Rodríguez, teatino; saliéronlas a rezebir al omilladero y la trugeron a Santa María y las depositaron en el altar mayor.

En este dicho año fue vn año de poco trigo que casi todo el año balió el anega de trigo a beinte y dos rs. y a beynte y quatro y el quartal de pan a beynte y seis mrs.

En este dicho año sallió el rey de Madrid para yr a Zaragoza con la almada que estaba allá.

Cogecha de bino este año fue buena; atasose el mosto a treinta y cinco mrs. la cántara y púsose de postura para el año de nobenta y tres a cinquenta y seis mrs. la cántara y estubo ansí todo el año.

Año de nobenta y tres [1593]

En el dicho año llubó poco; vbo deceplina de la cruz y trigeron a Nuestra Señora de las Biñas; estubo nuebe días en Santa María y al cabo llubió muy bien, lo que fue menester.

Cogecha de bino del año de xciij fue razonable; atasose el mosto a sesenta y dos mrs. la cántara y púsose de postura a dos rs. y medio para se bender en el año de xciiij; apugose este bino a beinte de mayo a tres rs. y medio; andubo así todo el año.

En este año ballió el pan muy caro porque se cogió poco, que balió el quartal de pan a beinte y quatro mrs. el quartar. //6r

Año de xciiij [1594]

En el dicho año fue vn año de muy poco trigo que si la villa no mercara tanpano[63] y mucho trigo bariera por vn real el quartal de pan, po[r]que vn poco de trigo que faltó se fue por el[l]o a Miranda de Ebro y yo llebé el dinero para pagallo a beinte y cinco rs. la anega de trigo y a siete rs. de traer, que salía la anega de trigo a treinta y dos rs., mas cumo lo rebolbieron co[n] vn poco que tenía el granero no balió más de a beinte y quatro mrs. el cuartal.

Dábase este pan en quatro casas, en cada quadrilla la suya.

Cogecha de bino del dicho año fu[e] grande; atasose el mosto a ochenta y vn mrs. la cántara y púsose para se bender en el año de xcv a tres rs. menos quartillo y pugose en el mes de abril a beinte y dos a tres rs. y quartillo; tornose a pugar a diez y siete de setienbre a quatro rs. menos quartillo.

Año de xcv [1595]

Año de xcv se izo la procisios[64] de San Gazinto y corieron toros.

A dos días del mes de abril se izo esta fiesta.

En este dicho año de xcv se [i]zo la fiesta de San Diego a beinte y quatro de setienbre.

En este dicho año de xcv fue vn año de mucho bino; atasose el mosto a quarenta y dos mrs. la cántara para se bender en año de nobenta y seis. //6v

Año de xcvj [1596]

En este dicho año fue vn año de muchas aguas que asta mediado de mayo no acía sino llober; no se podían andar en las biñas que artos días balían los obreros a real y quartillo.

En este dicho año se cogió poco trigo por las muchas aguas, que se aogó el pan.

En este dicho año no maduró bien la vba; echose la bendimia a catorce de otubre; atasose este mosto a real y balía en las pilas a beinte y quatro mrs. la cántara; a sesenta y quatro mrs. la cántara para el año de xcvij; pugose este bino a diez de otubre a quatro rs. la cántara.

A tres de nobienbre el bagó a tres rs. y quartillo asta que se acabó.

Año de xcvij [1597]

En este dicho año salió la gente de por fuerza para yr a Portugal; a diez y siete de enero lo señalaron y se fueron a beynte y seis de abril y fue por capitán Luis Gallo Garamillo; estubieron cosa de vn año; luego se bolbieron.

En este dicho año se cogió raçonable fruto, que se atasó el mosto a dos rs. y quarto y se puso de postura a tres rs. y así estubo asta que se acabó.

Cogecha de bino de nobenta y ocho fue mala porque bino vna escaha a primero de otubre que abrasó las biñas y a tres días del dicho mes bino otra escaha mayor que no degó nada y ansí se cogió poco fruto y mmalo; atasose este mosto a tres rs. menos quartillo y púsose para se bender en el año de nobenta y ocho a quatro rs. menos quartillo. //7r

En cartorze de mayo se puso este bino de atrás a cinco rs. y en doze de setenber se puso a seis rs.; en beinte de otubre se puso a ocho rs.; bendiose este bino año de nobenta y ocho cogida de nobenta y siete.

Año de xcviij [1598]

En este dicho año a dos de enero fueron las cuhilladas de Guzmán de Aguado y don Pedro Tamayo en la calle de la Miel; y estando riniendo los dos fue don Francisco Tamayo, ermano de don Pedro, por detrás y dio vna estocada a Guzmán por bago de la carillada asta la garganta y murió de elo luego. Prendieron al don Francisco y bino pescuisidor; senténciale a degollar; bínose alcançar por dineros.

En este dicho año se pusieron los hopos del cementerio de Santispiritus y los de la Puerta Deesilla.

En este dicho año murió el rey Felipe Segundo a diez y ocho de setienbre.

Cogecha de bino de dicho año de seiscientos y ocho[65], digo de nobenta y ocho, fue pequeña, que no se a bisto gamás, que se atasó el mosto a ocho rs. y medio y púsose de postura de diez rs.; estubo en esta postura todo el año.

Bendiose este bino año de nobenta y nuebe, aunque fue cogida de nobenta y ocho. //7v

En este dicho año se casó el rey Felipe Tercero a seis días del mes de abril.

Fue la peste desde prencipio de agosto de este año asta agosto de nobenta y nuebe; digo ser verdad, que abían muerto trecientas personas de esta enfermedad.

Año de 99 [1599]

En este dicho año fue la cosecha buena, que se atasó el mosto a dos res. y seis mrs. y se puso de postura para se bender en el año de seiscientos a tres rs. menos quartillo; pugose este bino a doze días del mes de setienbre a quatro rs.

Año de dc [1600]

Cosecha de este año de seiscientos fue [c]hica; atasose el mosto a tres rs. la cántara y púsose de postura para el año de seiscientos y vno a quatro rs. y a ocho de febrero se pugó a cinco rs.; tornose a bagar a qui[n]ce de gulio a quatro rs. y medio; a a[66] beinte de setienbre se tornó a pugar a seis rs.

Año de dci [1601]

En este año de seicientos y vno bino la cántara de siete açunbres a primero de abril. //8r

En este dicho año se quemó el altar mayor de Santa María y muy gran parte del tegado; fue Dios serbido que no llegó a el Santísimo Sagramento, avnque se quemó todo el altar.

Fue día de Nuestra Señora de Agosto.

Cogecha de bino del año de seicientos y vn años fue pequeña por vna escacha que bino que consumió mu[c]ha vba; atasose a cinco rs. y se puso de postura para se bender en el año de seicientos y dos.

Cose[c]ha de bino del año de dcj fue muy mala por vna mui grande elada que bin[o] a ocho del mes de otubre porque fue el año muy tardío y avn no estaba bien maduro; fue el bino bien bellaco; atasose este mosto de este año de dcj a cinco rs. y se puso de postura a seis rs. para se bender en el año de dcij a; abagose este, abagose este bino en beinte de marzo a quatro rs. [y] medio; tornose abagar en diez de setienbre a tres rs. y medio en este año de dcij.//8v

Año de dcij [1602]

Cogecha del bino de este año de seicientos y dos fue pequeña; atasose este mosto a quatro rs. y quartillo y púsose de postura para se bender en el año de dciij a cinco rs. y medio; pugose este bino a quince de febrero a seis rs. y medio; tornose a pugar este bino a veinte de marzo a siete rs. y medio; tornose a pugar este bino a ocho de junio a ocho rs. y medio; abagose este bino a prencipio de nobienbre a siete rs.

En este dicho año se pusieron los olmos de la Puerta de San Francisco siendo guardián frai Alonso de Mercado.

En este dicho año se començó la casa del rey de Bentosilla.//9r

Año de dciiij [1604]

Cosecha de bino de este dicho año fue buena; atasose este mosto a dos rs. y nuebe marabedís; púsose de postura para se bender en el año de dcv a tres rs. y pugose este bino a diez y seis días del mes de nobienbre a quatro rs. menos quartillo; tornose a pugar a diez de dicienbre a quatro rs. y medio.

Bino la tasa del trigo de a diez y ocho rs. a diez de otubre del año de dcv.

Año de dcv [1605]

Cogecha de bino de seicientos y cinco fue pequeña; atasose el mosto a quatro rs. y diez mrs.; pugose de postura para se bender en el año de dcvj a cinco rs.; pugose este bino a quatro de abril a seis rs.; tornose a bagar este bino a diez de agosto a cinco rs.

Año de dcvj [1606]

Coge[c]ha de bino de este año de dcvj fue buena; atasose el mosto a dos rs. y seis mrs. la cántara; púsose de postura para el año de dcvij a tres rs. menos quartillo; pugose este bino a seis días del mes de abril a tres rs. [y] medio y a ocho de setienbre se tornó a pugar a cinco rs. [y] medio y a beinte de setienbre se puso a siete rs. y a seis de nobienbre se abajó a cinco rs. //9v

Año de dcvij [1607]

Cogecha de bino de este año de dcvij fue mala porque se apedreó lo más del lugar, que no quedó sino el pabo el Endeduero; atasose el mosto a quatro rs. menos quartillo; púsose de postura a quatro rs. y medio la cántara en el año de dcviij; balió siempre ansí.

En este año bino vn recetor de Madrid a tomar botos de los regimientos para si era bien quitallos; vno con lo que se izo fuese a Madrid; bino luego otro y yzo lo mesmo y con lo que se izo llebolo a Consejo.

Año de dcviij [1608]

Cogecha de bino del año de dcviij fue moderada; atasose este mosto a dos rs. y veinte y dos mrs. la cántara; púsose este bino a qua[67] quatro rs. menos quartillo para se bender en el año de dcix a quatro rs. menos quartillo.

Año de dcix [1609]

Cogecha de bino de nobenta y nuebe fue raçonable; atasose este mosto a dos rs. y beinte y dos mrs. la cántara; púsose de postura para se bender en el año de seiscientos y diez a tres rs. y quartillo[68]; a 17 de mayo a quatro rs. menos quartillo; a doze de gu[l]io del año de 610 a cinco rs. porque estaba aquí el rey; tornose a bajar a vltimo día del mes de julio a quatro rs. menos quartillo y ansí se acabó. //10r

En este año de 609 trigeron a Nuestra Señora de las Biñas a catorze días del mes de abril por la gran falta de agua y fue Dios serbido que lubió todo lo que fue menester y megoraron mucho los panes por la entercisión de la Birgen.

En este dicho año se baut[iz]aron los moriscos de Ballençia, pero tubieron mal suceso que el rey Felipe Tercero dio tras ellos y mataron muchos de ellos y los de demás enbiaron a Berbería y a otras partes de enemigos. Y luego dio en el año de seicientos y diez tras los de Castilla la Nueba y la Bieja que no quedó ninguno que no echó aquellas partes; avnque fuesen niños de teta, todos caminaban.

En este dicho año balió el trigo muy barato, que balía en Aranda a cinco rs. y medio y a seis.

Año de dcx [1610]

En este año de seicientos y diez bino el príncipe, yjo del rey Felipe Terzero, [a] Aranda a dos días del mes de junio y aposentó en las casas de dos[69] Juan de Abellaneda; tomaron toda aquela cera de casas desde las Cernecerías asta la Puerta de Duero para él y sus criados y criadas; quiso Dios dalle vna muy grande enfermedas[70] que se puso que se muriera; durole más de quatro meses; trigeron a Nuestra Señora de las Viñas en vna muy gran procisión; estubo en Santa María //10v más de vn mes y los conbentos en sus casas sacaron los de San Francisco a San Diego nuebe días y benían en vna solene procisión por la Plaza Nueba que lo bía el príncipe desde su cama porque se la sacaban a la sala; vbo deciplina de la Ermandad de la † [Cruz]; binieron el rey y la reyna desde Llerma aquí mediado el mes de gulio; estubo el rey y la reyna en Aranda con mucha cantidad de su corte asta mediado el mes de octubre y después se fue el rey y la reyna al Escurial y se quedó el príncepe y la princesa hasta nuebe de nobienbre.

Cosecha de bino del año de 610 fue buena; atasose el mosto a dos rs. y <seis> mrs. y púsose de postura para el año de seicientos y onze a tres rs. y lo blanco a tres rs. y medio; pugose este bino a primero de mayo a tres rs. y medio; tornose a [borrado] este bino a quatro días de j[ulio] a quatro rs.; tornose a pugar a tres de agosto a quatro rs. beinte mrs.

Bino a baller la anega de trigo en el año de 611 a tres rs. y a quatro.

Año de 612

Cogecha de bino del año de seicientos doze fue raçonable; atasose este bino a tres rs. y ocho mrs. y de diez vna; púsose a primero [borrado] el año de seicientos y doze [borrado] rs.; púsose este bino a diez y ocho días del mes de enero a quatro rs. y medio la cántara; se tornó a pugar a seis días del mes de marzo a cinco rs. y seis mrs.

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[1] Abreviaturas utilizadas: ADBu=Archivo Diocesano de Burgos; AHNob=Archivo Histórico de la Nobleza.

[2] A. García Sanz ha descrito los vinos tradicionales de esta comarca como “buenos vinos de pasto con unos 11 grados alcohólicos, inestables, sobre todo, al trasportarlos a distancias mayores de 100 km y con cambios de presión y temperatura”. García Sanz 2016, p. 120.

[3] Iglesia Berzosa y Villahoz García 1982, pp. 21-23.

[4] Casado Alonso 1987, pp. 127-137.

[5] Se extendía también a Palencia (Dueñas, Tierra de Campos y Becerril), Valladolid (Cigales), Zamora (Toro), Ávila (Madrigal de las Altas Torres) e, incluso, más allá del Sistema Central. Sebastián Moreno 2017, pp. 148-156.

[6] García Sanz 1986, p. 112.

[7] La de Sotillo de la Ribera comienza en 1667. García Sanz 2016, p. 125.

[8] García Sanz 1989, p. 224-226.

[9] AHNob, Bornos, leg. 184/5.

[10] En 1578 era un cosechero que vendía 345 cántaras de vino. Iglesia Berzosa 2003, p. 108.

[11] 1616, enero, 3. Aranda de Duero. Testamento. AHNob, Bornos, leg. 805/7.

[12] Cuesta Nieto 2015, pp. 221-240.

[13] Esta familia está asentada en Aranda desde comienzos del siglo XV, cuando ya destacan como ricos labradores. A la segunda generación documentada de la familia pertenece Gonzalo García de Quemada, casado con Constanza Díaz, quien entre otros cuantiosos bienes que dejó a su muerte, ocurrida hacia 1481, figuraban más de 50 Ha de viñedo que se tasaron en 150.000 mrs. Peribáñez Otero 2016, pp. 58-65.

[14] Iglesia Berzosa y Villahoz García 1982. Iglesia Berzosa 2000, pp. 141-156; Iglesia Berzosa 2003, pp. 75-116. Ferrer Garcés 1992. Montoya García-Real 2012.

[15] Se da noticia del encabezamiento de las alcabalas (1584), de la muerte de Guzmán de Aguado a manos de don Francisco de Tamayo (1598) y del consumo de un regimiento (1607).

[16] Da noticia de la revuelta de Aragón (1591) y la posterior jornada de Felipe II a Zaragoza (1592), el matrimonio de Felipe III y la muerte de Felipe II (1598) y la expulsión de los moriscos de Valencia (1609) y de los de ambas Castillas (1610). Los propios arandinos se vieron implicados en el envío de tropas a Portugal en 1597. Tanto o mayor impacto en la vida de la villa tuvo la estancia del príncipe Felipe en Aranda durante varios meses por enfermedad (1610).

[17] Según Loperráez, fue trasladado a Aranda por orden del obispo D. Francisco Velázquez en el año 1587 con permiso de la abadesa del Real Monasterio de las Huelgas de Burgos. Nuestro informante adelanta la fecha tres años. Loperráez Corvalán 1788, tomo 2, pp. 35 y 181.

[18] Tal que la coyza de la villa y corrida de toros el día de la Cruz de mayo (1588), el envío de unas reliquias (1592), la procesión de san Jacinto con corrida de toros y la fiesta de san Diego (1595).

[19] Se pasó el rastro a los portales de Rasiñas (1585), se pusieron los chopos del cementerio de Sancti Spiritus y de la puerta de Isilla (1598) y los olmos de la puerta de San Francisco (1602). En otro orden de cosas, se comenzó la construcción de la casa del rey de Bentosilla (1602) y hubo dos incendios graves (1590 y 1601), quemándose en el segundo el altar mayor de la iglesia de Santa María y gran parte del tejado.

[20] ADBu, Aranda de Duero (iglesia de Santa María), Libros de bautizados. Los asientos de los bautismos los hacían de forma alternativa dos curas; hasta 1550 sólo lo hace uno, lo que explica las cifras anormalmente bajas obtenidas.

[21] J. Moral García, que ha estudiado la población de la villa en los siglos XVI y XVII, utiliza los datos de los censos, pero no los de la iglesia de Santa María para el siglo XVI. Moral García 1991, pp. 166, cuadro 4.

[22] González Prieto 2005, pp. 84-100.

[23] González Prieto 2005, pp. 96.

[24] Tapia Sánchez, 2008: 368-369.

[25] El jesuita Hernando Pecha recordaba a 1580 como el año del catarro. García López 2010, pp. 162.

[26] Entre los 15 pueblos en que ha obtenido las series parroquiales de defunciones, sólo constata esta situación en Córcoles y Espinosa de Henares (13,3 % de los pueblos). Velasco Sánchez 2010, pp. 132.

[27] González Prieto 2005, pp. 98.

[28] En Ávila hubo malas cosechas en 1590 y 1591. Tapia Sánchez 2008, pp. 369.

[29] En la provincia de Ávila el contagio, extendido a numerosos pueblos, comenzó entre agosto y noviembre de 1599 y vino precedido por una epidemia de tifus. Tapia Sánchez 2008, pp. 369.

[30] González Prieto 2005, pp. 122-126.

[31] En la ciudad de Burgos los bautismos se redujeron un 22 % entre 1616 y 1620, mientras en varios pueblos de las llanuras occidentales de la provincia lo hicieron en un 31 %. Los años 1612-1614 fueron de malas cosechas. González Prieto 2005: 127.

[32] Moral García 1991, pp. 159-179.

[33] González Prieto 2005, p. 105.

[34] La alcabala del vino pasó de representar el 26,8 y 28,4 % del importe de todas las rentas reales en 1557 y 1558-1560 respectivamente a valores entre el 39,4 y 40,8 % de 1579 a 1595. Iglesia Berzosa 2003, p. 110.

[35] Otros autores han calculado 316.303 cántaras para el periodo 1590-1595, cuando de Fuentespina obtuvo una media de 47.123 cántaras, Quemada 8.897, Sinovas 6.893 y Villalba 2.478, las cuatro aldeas de Aranda, y en las cinco localidades la media por productor era de 768 cántaras. Iglesia Berzosa 2003, pp. 75-116. También ha tratado el tema E. Montoya que se limita a citar y reproducir sus datos sin aportar nada nuevo para este periodo (Montoya García-Real 2012, p. 67).

[36] Huetz de Lemps 2004, pp. 257 y 347, notas 1.029 y 1.031.

[37] Huetz de Lemps 2004, pp. 535-544. El mismo sistema para la villa de Fuentelcésped está descrito en García Sanz 2016, pp. 97-98.

[38] García Sanz 1989.

[39] Hernández 1986, p. 277.

[40] ADBu, Pampliega, Libros de fábrica.

[41] Sebastián Moreno 2017, p. 180.

[42] Fagan 2009, pp. 95-96.

[43] Dostal y Bürger 2010, pp. 123-124.

[44] El invierno de 1601 fue muy frío en el alto valle del Rin, habiendo permanecido este río helado. Dostal y Bürger 2010, pp. 123-124. Y el verano, el más frío desde 1400. Fagan 2009, pp. 162-163.

[45] García de Quevedo 1923, pp. 133-134.

[46] El clima fue templado desde enero y hubo lluvias abundantes en abril, mayo y junio, produciéndose una buena cosecha de pan y extraordinaria de vino y fruta. García de Quevedo 1924, pp. 161-164.

[47] En Cataluña fueron muy fríos el invierno de 1573, las primaveras de 1576 y 1578, que arruinaron las viñas, el invierno de 1581-1582, la Semana Santa de 1587 y enero de 1589. Barriendos 2013, pp. 149-150.

[48] García Sanz 2016, pp. 122-123.

[49] García Sanz 2016, pp. 92-94.

[50] Cuesta Nieto 2015, p. 239.

[51] García Fernández 2004, p. 163.

[52] En 1578 había en Aranda 1.278 vecinos, de los 357 eran cosecheros (28 %); de éstos, 122 eran los principales cosecheros (10 %). Iglesia Berzosa 2003, p. 104.

[53] Iglesia Berzosa 2003, p. 98.

[54] Brumont 1991, p. 115.

[55] En la merindad de Rioja se cosechaban 69 cántaras por vecino, en la de Bureba 39, en la de Candemuñó 92, en la Castrojeriz 125, en la de Campos 88, en la de Carrión 65 y en la de Monzón 98. Se superaban las 150 cántaras por vecino en 2 pueblos de 48 de la merindad de Rioja, 6 de los 34 de la de Candemuñó y 10 de los 38 de la de Castrojeriz. Brumont 1994, pp. 116-117.

[56] Cuesta Nieto 2015, p. 233.

[57] Ibáñez Pérez 1990, pp. 193-195.

[58] De este total, 26.582 cántaras eran de vino blanco y 141.345 de tinto. Brumont 1991, pp. 118-119.

[59] González Prieto 2005, pp. 96-101.

[60] Tomamos las 167.927 cántaras que entraron en Burgos en 1579-83 como base para estimar el consumo de vino en la ciudad, pero recalculamos el consumo por vecino tomando los 3.270 vecinos que da González Prieto para 1580 obteniendo una cifra de 51,35 cántaras, lo que supone un tercio menos de lo estimado por Brumont, que, recordemos, era de 76 cántaras por vecino.

[61] Cuesta Nieto 2007, pp. 172-177. Aranda pierde un 45 % de su vecindario entre 1561 y 1591, mientras los pueblos de la comarca de la Demanda perdieron un 19,6 %.

[62] En el caso riojano esa demanda procederá de Vizcaya y la Montaña en que sus vinos sustituirán a los de Castilla y Galicia. Brumont 1994, p. 275.

[63] Sic: temprano.

[64] Sic: procesión.

[65] Tachado: seiscientos y ocho.

[66] Sic. Letra repetida.

[67] Sic.

[68] Tachadura.

[69] Sic.

[70] Sic.